China anunció la intención de continuar ampliando su programa de exploración espacial con una misión de recogida de muestras de la Luna este año y otra en 2020 cuyo objeto será Marte, informó el subdirector de la Agencia Nacional Espacial de China (ANEC), Wu Yanhua.
Después de que la sonda china Chang’e 4 alunizara “con total éxito” el pasado día 3 en la cara oculta de la Luna por primera vez en la historia, los planes de Pekín pasan por transportar a la Tierra fragmentos del satélite: “la misión de recogida de muestras de la Chang’e 5 está prevista para finales de 2019”, dijo Wu.
Estas muestras llegarían al planeta azul “para 2020”, precisó el número dos de la ANEC, misma fecha para la que está prevista “la primera misión de exploración de Marte”, unas empresas —apuntó Wu— abiertas a la participación capital internacional.
Otras de las próximas misiones, en especial la prevista Chang’e 8, tratarán de probar “tecnologías clave” y “llevar a cabo exploración preliminar”, aseguró el ponente, de cara a la construcción de una base científica en la Luna en el futuro para la que, no obstante, rechazó dar plazos.
Wu tampoco detalló fechas para una posible misión tripulada a la Luna, un supuesto “que están estudiando científicos chinos”, de momento “en fase de investigación y aún no en la de toma de decisiones”.
Respecto a la actual misión, la Chang’e 4, su ingeniero jefe, Sun Zezhou, minimizó las dificultades del terreno con las que se podía topar el vehículo explorador en la cara oculta de la Luna, ya que la fotografía de 360 grados publicada el pasado viernes por la ANEC mostraba un terreno salpicado de cráteres.
Sin embargo, el experto indicó que “si hay obstáculo delante, el vehículo se detendrá y buscará otro camino de manera autónoma. Además, debería poder adaptarse de manera fácil a los obstáculos y las subidas”.
El programa Chang’e comenzó con el lanzamiento de una primera sonda en 2007, y desde entonces se han llevado cuatro aparatos más al único satélite de la Tierra.
Con información de Milenio.