Ismael El Mayo Zambada, será juzgado bajo los llamados “Estatutos de Kingpin” y bajo ellos puede ser condenado a la Pena Capital.
Según estas leyes, o “Estatutos de Kingpin”, del 15 de abril del 2009; las personas que participan en una empresa criminal continua, y que intencionalmente matan a otro ser humano, o cuyas acciones provocan la muerte de terceros puede ser condenado a muerte.
A diferencia del caso del Chapo Joaquín Guzmán Loera, Zambada no fue extraditado, por lo que el Departamento de Justicia de los Estados Unidos no tiene la obligación de abstenerse de solicitar la pena de muerte para él. Los delitos de que se acusa al Mayo Zambada son tan graves que la ley específicamente prohíbe que quien sea acusado de ellos pueda alcanzar cualquier tipo de libertad condicional. Estas leyes diseñadas para castigar a los traficantes de drogas también prohíben la suspensión de las sentencias de quien resulte culpable de ellas en una corte de justicia.
Ismael Zambada García puede buscar mediante negociaciones el estatus de “Testigo protegido”, pero la ley llamada “Foreign Narcotics Kingpin Designation Act” del 3 de diciembre de 1999, bajo la cual está siendo procesado, y bajo la que será juzgado, le amarra las manos a los fiscales para tener con él, cualquier tipo de compasión.
No solo eso. Esta misma ley permite que Estados Unidos secuestre todos los bienes materiales que estén a su alcance. El Mayo, que ha estado dando información acerca del cartel y sus asociados desde que fue detenido, sabe que en este ambiente lo único que puede es tratar de salvar la vida canjeando la pena de muerte y contando a cambio, quienes son y han sido sus socios en toda su empresa criminal.
Estados Unidos no tendrá otra mejor oportunidad para castigar con la pena máxima, al autor de las más de 100 mil muertes de estadounidenses atribuidas a su tráfico de Fentanilo. Y no tendrá pronto otra oportunidad para hacerlo a la vista del mundo entero.
El caso del Departamento de Justicia del gobierno de Estados Unidos está siendo manejado a través de la Sección Internacional de Narcóticos y Lavado de Dinero. Los fiscales federales adjuntos Francisco J. Navarro, Robert M. Pollack y Lauren A. Bowman están a cargo de la acusación.
Según estos fiscales, el Cartel de Sinaloa es la mayor organización criminal del planeta. La muerte de los más de cien mil estadounidenses atribuidas a sus miembros y a Zambada, no hay otra forma de cobrarla más que con la pena de muerte.
Las actas acusatorias que están en poder del Distrito Este de Nueva York y que son parte del voluminoso expediente acusatorio, Ismael Zambada García a través de 40 años ha provocado muertes, actos criminales y desgracias de todo tipo.
¿Cuántos estadounidenses se sentirían reivindicados, de que uno de los principales causantes de muertes, secuestros, asesinatos, chantajes, y crímenes impensables sea forzado a verse, cara a cara con la justicia? Con la misma justicia que él tiene tantos años negándoles a las víctimas de su Cartel.
¿Cuántos mexicanos se sentirían reivindicados de ver que el máximo castigo se aplica como ejemplo para quien ha causado tanta inestabilidad social? ¿Para quién ha comprado la voluntad de los políticos y los gobiernos, aunque eso destruya a quien le estorbe, sin importar si las oportunidades de desarrollo, libertad y oportunidad para un país también son destruidas?
México y Estados Unidos bajo ese criterio son víctimas del cartel y de su jefe y fundador.
Por eso el viernes 13 de septiembre, cuando terminó la vista inicial del Mayo frente al Juez James Cho en Brooklyn, los fiscales federales, estatales y locales que llenaron la sala durante la audiencia, ahí mismo en el piso once, de la Corte en Brooklyn, tuvieron una celebración tan grande y ruidosa que más parecía una fiesta de fin de año.
Ese día hubo tantos fiscales presentes que la prensa fue relegada a una sala adicional en donde vio la audiencia por televisión.
¿Se da usted cuenta de la presión que existe para castigar al Mayo?
En el tribunal del Distrito Este del Estado de Nueva York hay varios oficios legales presentados por sus fiscales en las que se acusa a Ismael Zambada de presidir la más vasta y violenta operación criminal… ¡en el mundo! Es el capo de todos los capos.
Estos documentos presentados ante la corte que juzgará a Ismael Zambada enumeran la capacidad de destrucción del Cártel de Sinaloa. Los fiscales acusan a la organización de crear y mantener un enorme arsenal de armas de grado militar. También de usar sin piedad, una fuerza privada de seguridad que es casi comparable al ejército de un país mediano. El cartel de Sinaloa creó cuerpos de “sicarios”, que diariamente cometen asesinatos, secuestros y torturas, y adquirió influencia para manejar a su antojo a los gobiernos de todos los tamaños por todo el continente .
Los “Estatutos Kingpin”
El reconocido líder del Cártel de Sinaloa fue arrestado por las autoridades estadounidenses junto con un hijo de Joaquín “El Chapo” Guzmán. Ambos recibieron acusaciones judiciales en virtud del “Estatuto Continuo de Empresas Delictivas”.
La Suprema Corte de Estados Unidos en el caso de Kennedy vs. Luisiana, abrió la posibilidad de aplicar la pena de muerte a quienes cometan delitos contra el Estado. Estos incluyen asesinatos, traición, espionaje y (la más relevante en este caso) tráfico de drogas ilegales a gran escala.
Dado que Estados Unidos capturó al líder del mayor cártel en el mundo y sin tener la cooperación de las autoridades mexicanas, este caso da a la justicia estadounidense pretexto para enviar un mensaje muy claro. La ejecución del Mayo Zambada serviría de poderoso ejemplo.
¿Habría algún otro obstáculo para llevar a cabo una sentencia de muerte?
Los que se oponen a que Ismael Zambada sea ejecutado, alegan que él es el único que sabe cómo funciona el cartel, quienes son sus miembros, y quienes son sus clientes en todo el mundo.
- ¿Quiénes lo protegen?
- ¿Cuánto cobran y han cobrado por esa protección?
- ¿Hasta que niveles de los gobiernos de México, Estados Unidos y de otros países ha llegado esa cooperación comprada?
Hay algo a considerar, a los 77 años, Ismael Zambada es un hombre anciano, con múltiples afecciones y enfermedades, que, aunque están siendo tratadas, dejan aun la posibilidad de que estos males resulten en su muerte en prisión, mucho antes que su ejecución se lleve a cabo.
Los condenados a muerte, en un caso como este, tienen avenidas de apelación cuyo efecto de hecho y derecho retrasan las ejecuciones durante años.
En su audiencia inicial de cargos en Brooklyn, Ismael Zambada García fue clasificado como demasiado peligroso para ver el exterior de una celda otra vez. Mientras El Mayo permanezca en el estado de Nueva York, los alguaciles federales reforzarán la corte en Brooklyn, su lugar de detención, y sus transportes fuera y dentro de los juzgados.
La urgencia para sacar al Mayo de Texas se debió también a que los alguaciles, (Marshalls federales) temían y aún siguen temiendo por su vida, porque… Los muertos no hablan, ni testifican en los juicios.
Declaración de no culpabilidad
En la audiencia del día 13, Ismael Zambada García, se declaró no culpable de 17 cargos criminales federales, relacionados con el manejo de su notorio imperio de la droga, estos cargos son distintos a los que enfrenta en otros estados. En el estado de Nueva York la situación es tan sería porque las acusaciones judiciales son por manufactura, tráfico y distribución de Fentanilo.
Esta quinta acusación formal dice; Por—“Conspirar para fabricar y distribuir una sustancia que contiene N-fenil-N-[1-(2-feniletil)- 4-piperidinil] propanamida (“Fentanilo”), sustancia que en Estados Unidos es controlada, forma parte de la llamada “Lista II” que incluye el conocimiento de que dichas sustancias serían importadas ilegalmente a los Estados Unidos y el propósito de evadir con todo el conocimiento esas leyes para llevar a cabo un acto criminal.
El fiscal Francisco Navarro en su presentación de cargos afirmó:
“Una celda en una cárcel de Estados Unidos es lo único que impedirá que el acusado cometa más crímenes”.
Los fiscales federales pidieron que el caso sea designado “Un proceso complejo”, porque los presuntos crímenes abarcan varias décadas y requieren de montañas de documentos y pruebas potenciales. Este caso probablemente incluirán material clasificado.
Frank Pérez, abogado defensor, dijo después de la audiencia de presentación de cargos que Zambada se encontraba en buen estado de salud y de buen humor. El abogado Pérez no quiso hacer ya más comentarios, ni sobre el juicio, ni sobre el arresto de Zambada.
La Pena de Muerte en el estado de Nueva York/ casos estatales y casos federales
La pena capital fue prohibida en el estado de Nueva York después de que su Tribunal Estatal de Apelaciones, declarara en el 2004, que no estaba permitida según la constitución del estado. Sin embargo, ciertos delitos ocurridos en el estado que caen bajo la jurisdicción del gobierno federal si están sujetos a la pena de muerte.
En todo el estado de Nueva York, la silla eléctrica era el método de ejecución preferido. Posteriormente la ejecución en la horca reemplazó a la silla. Pero en 1995, el gobernador George Pataki, promulgó un nuevo estatuto que restableció la pena de muerte en el estado, y autorizó a la inyección letal para las ejecuciones en casos federales. El caso del señor Zambada es federal.
Con información de: El Economista