“Las mujeres cuando abortamos no somos criminales, somos seres pensantes que estamos tomando decisiones autónomas en cuanto a nuestra reproducción”, afirmó Verónica Cruz Sánchez, directora del “Centro Las Libres”.
En agosto del 2000, el gobierno de Guanajuato eliminó la única causal por aborto: la violación, es decir, si una mujer decidía abortar, tendría que purgar penas de hasta 30 años.
En ese contexto nació “Las Libres”, asociación a favor del aborto seguro y legal, que logró que se vetara la ley en el estado.
De acuerdo con Verónica Cruz, “no debería existir el delito de aborto; se tiene que eliminar porque es un delito que se focaliza en ciertas mujeres: nunca vas a encontrar a una mujer rica, nunca vas a encontrar hombres, nunca vas a encontrar a médicos que están criminalizados por un tema de aborto.
“Sólo es a las mujeres, pero además a las mujeres pobres, a las de área rural, a las de área indígena y entre menos se puedan defender más sentencia, más condena, y el Estado pone todo su peso a estas mujeres”, enfatizó.
En septiembre del 2010, seis mujeres: Yolanda Martínez Montoya, Susana Dueñas, Ofelia Frías, María Araceli Camargo, Liliana Moreno y Rosa Padrón salieron del Centro de Reinserción Social (Cereso) en Guanajuato.
Habían sido acusadas de homicidio por razón de parentesco o aborto; sus sentencias oscilaban entre los 25 y 29 años. Una vez más “Las Libres” ganaban terreno.
“La mayoría de las mujeres no sabía leer y escribir en el momento de su detención. Eso ya debería de ser para que estén afuera; la mayoría no hablaba español y provenía de área indígena; peor aún, la mayoría de las mujeres no está en la cárcel con pruebas científicas, está por estereotipos de género”, expuso.
Para “Las Libres”, apuntó, “es muy fácil: cualquier caso de aborto o de homicidio que se trata de aborto, defenderlo. Es muy fácil, porque el estado como juzga con estereotipo, con prejuicio, los médicos, los ministerios públicos, los jueces, lo que anteponen son sus prejuicios y sus estereotipos de género; es decir, lo que ellos creen de las mujeres y lo que ellos creen de la maternidad. Nunca hay pruebas científicas”.
En marzo de 2015 “Las Libres” salieron de Guanajuato para tomar un caso en Veracruz. Patricia Méndez fue trasladada del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) al Ministerio Público, acusada de haber asesinado a “su hijo”. Verónica Cruz llegó a tiempo para que no se le juzgara por homicidio.
La entidad está regida por otras leyes para castigar el aborto. “El caso de Veracruz es brutal, no tiene pena de cárcel, pero dice que se le va a dar un tratamiento, una reeducación a las mujeres, porque las mujeres nunca lo hacen solas, siempre lo hacen obligadas, están diciendo no tiene capacidad, pero además no saben que su destino final es peor, es una discriminación peor que la cárcel”, señaló la directora de la organización.
En este momento, julio de 2019, en el Centro “Las Libres” se preguntan: ¿en qué prisiones están las 200 mujeres encarceladas y bajo qué delito están tipificados sus casos? En la asociación aseguran que desde el gobierno se podría conseguir inmediatamente esta información.
“Ojalá todas las mujeres nos conocieran, pero eso es imposible. Por eso, el Estado tiene que hacer su función y creo que el tema de la amnistía es una respuesta para estas mujeres que hoy sí están en prisión con penas de hasta 30 años”, expresó Cruz Sánchez.
Planteó que “el Estado, ahora sí sus instituciones, tiene que investigar: ¿quiénes son estas mujeres?, ¿en dónde están?, ¿cómo están sus causas? y seguro es muy fácil proponer la amnistía, porque seguramente están injustamente criminalizadas y sentenciadas y en prisión por delitos que no cometieron”.
Acciones a futuro
Para la activista hay tres cosas que tiene que hacer el Estado mexicano, en su conjunto incluyendo a la sociedad: “uno, que quite del código penal único que ya no lleve al delito de aborto, con eso eliminamos la criminalización”.
“Dos, que al menos se armonicen en todo el país hasta las 12 semanas el aborto por decisión de las mujeres; y tres, la Norma 046, hoy en todo el país basta con el dicho de que las mujeres necesitan los servicios de salud, sin denuncia, incluso deben dar aborto legal, el servicio gratuito legal a todas las mujeres”.
Abortar: una decisión de mujeres
Para Verónica Cruz Sánchez se trata de acompañar a otras mujeres. “A construir la autonomía de las mujeres en nuestras propias decisiones. La primerísima acción: decidir sobre nuestro propio cuerpo, cuándo sí y cuándo no, que no se nos imponga a las mujeres como mandato y mucho menos como mandato divino la maternidad”.
“Nos tenemos que encargar las mujeres y la población de hacer esta exigibilidad al gobierno. Yo sí tengo esperanza de que en estos seis años lo vamos a lograr, al menos esas tres cosas”, apuntó.
Con Información de Notimex