Angela Merkel se despidió como líder de los Demócratas Cristianos este viernes con un emotivo discurso ante sus correligionarios conservadores, reunidos para elegir a un sucesor que se convertirá en candidato a asumir también la jefatura del Gobierno.
Los principales candidatos son Annegret Kramp-Karrenbauer, una protegida de Merkel considerada como la candidata de continuidad, y Friedrich Merz, un rival de la canciller federal que ha cuestionado la garantía constitucional de asilo a todos los “perseguidos políticamente” y que cree que la mayor economía de Europa debería contribuir más a la Unión Europea.
Merkel anunció en octubre que dimitiría como jefa del partido pero continuaría siendo canciller, tratando de llevar a cabo una salida ordenada tras los reveses sufridos desde su polémica decisión en 2015 de mantener las fronteras alemanas abiertas para los refugiados que huyen de la guerra en Oriente Medio.
Merkel, de 64 años, expresó al congreso de la CDU en Hamburgo su gratitud por la posibilidad de haber servido como jefa del partido durante 18 años, 13 de ellos como canciller, durante los cuales ha llegado a dominar la política europea como su principal gestora en tiempos de crisis y generadora de consensos.
“Ha sido un gran placer para mí, ha sido un honor”, dijo mientras trataba de contener las lágrimas ante un auditorio que le dedicó una ovación de 10 minutos.
“En momentos como estos, defenderemos nuestros puntos de vista liberales, nuestra forma de vida, tanto en casa como en el extranjero”.
“La CDU de 2018 no debe mirar hacia atrás sino mirar hacia delante, con gente nueva… pero con los mismos valores”, agregó Merkel, quien dijo que sería neutral respecto a su sucesor al frente del partido.
El nuevo líder de la CDU será elegido por mil uno delegados que votarán en el congreso este viernes. El ganador probablemente liderará la CDU en las próximas elecciones federales, previstas para octubre de 2021.
Con información de El Financiero.