El arzobispo potosino Jesús Carlos Cabrero Romero hizo un balance nada optimista del año que concluye: pobreza, violencia, sangre, y de manera particular habló sobre la violencia que han padecido las mujeres en sus diversas modalidades.
Pese a este escenario terrible hizo votos para que el año próximo la situación se mejore para todos, para San Luis Potosí, para México y el mundo.
Tras su homilía dominical, atendió como es costumbre a los representantes de los medios de comunicación, el arzobispo potosino encontró en la Navidad motivos para “descubrir a Dios que se vuelve tan cercano y nos abraza con su cariño”.
Pero ante la creciente violencia hacia la mujer, física, emocional, acoso y feminicidios, afirmó que en el 2018 predominó esa situación, además de las sorpresas políticas y sociales.