Debido a la “toda la información estratégica del país” con la que cuenta un presidente, debería ser ilegal que éste trabaje al término de su sexenio en empresas privadas, afirmó Andrés Manuel López Obrador para referirse a los casos de los exmandatarios Felipe Calderón y Ernesto Zedillo.
Luego de la respuesta de Calderón Hinojosa, quien aseguró que no incurrió en tráfico de influencias o en conflictos de interés por su vínculo entre 2016 y 2018 con la empresa Avangrid, filian de Iberdrola, que vende energía eléctrica a la Comisión Federal de Electricidad, el presidente le pidió que no se enoje y lo disculpe.
“Felipe Calderón tiene relaciones con empresas extranjeras. Termina su mandato y se va a trabajar como consejero en una de esas firmas. Yo le digo que no se moleste, le ofrezco disculpas, pero que se les pasó la mano, eso no se puede hacer”, dijo en conferencia.
López Obrador calificó esa relación laboral de Calderón Hinojosa, así como de Ernesto Zedillo, a quien señaló de haber trabajado en una empresa que se benefició de la privatización de los ferrocarriles de México, como actos “inmorales”.
Al respecto, el exmandatario en el periodo 2006-2012 escribió en Twitter: “La ley prohible aceptar cargos durante 1 año posterior al término del ejercicio del servidor público. Independientemente de que Avangrid no tiene actividades en México, mi pertenencia a su consejo tuvo lugar entre 2016 y 2018, 4 años después de haber concluido el cargo”.
Sin embargo, López Obrador consideró que no deberían ser legales estas prácticas debido a las relaciones los conocimientos que tiene un expresidente en torno al país.
“No es un asunto legal, aunque debería serlo, pues un presidente tiene toda la información estratégica del país, por su cargo establece relaciones. Si no es ilegal, es inmoral. Esas cosas ya no deben seguir”, aseguró.
Reiteró además que ha habido casos de exsecretarios de Energía que al terminar sus funciones en el Gobierno federal eran contratados por empresas a que se le sabían dado contratos con subsidio, lo que indica que “hay conflicto de interés. No se vio bien ni es ético”.
Además, aclaró que no debatirá con Calderón Hinojosa y que este tipo de casos ya no deben continuar.
Con información de Excélsior.