El Presidente Andrés Manuel López Obrador acusó ayer un conflicto de interés en la posible fusión de Fox y Disney, debido a que un ex funcionario de la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece) es quien gestiona el trámite ante esa misma autoridad.
Aunque el Presidente se refirió a un conflicto de interés en Ifetel, la vocería de la Presidencia rectificó minutos después para decir que se trataba de la Cofece.
En concreto se trata de Eduardo Pérez Motta, ex presidente de la Cofece y cuyo despacho, SAI Derecho & Economía, fue contratado por las empresas para gestionar la fusión ante la autoridad antimonopolios, de acuerdo con fuentes de la Presidencia.
“Soy respetuoso del organismo que regula y define sobre estos temas, pero también tengo información de que hay conflicto de intereses”, afirmó López Obrador y sostuvo que órganos autónomos deben rendir cuentas ante la sociedad de sus decisiones.
Ésta no es la primera vez que el Ejecutivo federal arremete contra acciones y decisiones de instituciones autónomas.
Recientemente, el Presidente reconoció públicamente que su Gobierno “intervino” en la Suprema Corte de Justicia para evitar la aprobación de una resolución que habría concedido un amparo a Grupo Modelo.
Pérez Motta, se desempeñó como presidente de la antigua Comisión Federal de Competencia Económica (CFC) de 2004 a 2013, año en que se convirtió en la actual Cofece y desde 2018 se volvió socio de SAI Derecho & Economía, firma especializada en temas de comercio exterior, competencia económica, entre otros.
Según el Artículo 88 de la Ley Federal de Responsabilidades de Servidores Públicos, no pueden aceptar o solicitar empleo aquellos cuyas actividades profesionales se encuentren directamente vinculadas a las actividades como servidor público, hasta un año después de su salida de la función pública.
En su caso transcurrieron cinco años para que se involucrara en la IP, por lo que legalmente no está impedido para conocer de estos temas.
José Luis Peralta, ex comisionado de la extinta Cofetel cuestionó a AMLO.
“Lo que pretende el Presidente es tener injerencia en un asunto que es competencia exclusiva de los órganos reguladores”, dijo.
Con información de Zócalo