Con 328 votos a favor, 153 en contra y dos abstenciones, el pleno de la Cámara de Diputados aprobó en lo general el proyecto de reformas a la Constitución en materia de revocación de mandato y consulta popular que, en su caso, permitirían al presidente Andrés Manuel López Obrador aparecer en una boleta electoral en 2021.
Entre protestas de la oposición con pancartas en tribuna y en sus curules, la mayoría conformada por Morena, PES, PT, PVEM y 7 legisladores ex perredistas avalaron el dictamen que abre la posibilidad de convocar a la consulta revocatoria del mandato presidencial el día de la próxima elección de diputados federales, a solicitud del propio Presidente de la República, de una tercera parte de los integrantes de cualquiera de las cámaras del Congreso o de un número de ciudadanos equivalente a 3 por ciento de los electores inscritos en la lista nominal.
La revocación sería vinculante con la mayoría de los votos depositados en las urnas, siempre y cuando la participación sea de al menos 40 por ciento de los ciudadanos inscritos a la lista nominal de electores. Desde la tribuna y flanqueado por los legisladores integrantes de su bancada, el legislador panista Marcos Aguilar alertó sobre los riesgos de perpetuar el mandato presidencial, como ha ocurrido en Venezuela, Bolivia y Nicaragua.
“En Acción Nacional lo decimos de forma contundente: ¡no a la intervención del Presidente de la República en las elecciones intermedias! El mandato constitucional del presidente es de seis años, es el tiempo que tiene para cumplirle a los mexicanos. Ni más ni menos”, remarcó.
Acompañada por su fracción legislativa en tribuna, la priista María Alemán secundó la advertencia y dijo: “No es más que la clara intención de llevar al Presidente a la boleta electoral en la elección de diputados federales intermedia a su mandato.
Que insisto, no estamos hablando de una elección con el único objetivo de que si su aprobación sigue siendo positiva, esto ayude, abone a ganar espacios en la Cámara que le permitan mantener su mayoría y como hasta ahora, hacer y deshacer a su antojo, siendo así el siguiente paso, es la reelección”.
En su turno y por conducto de Sergio Gutiérrez, la mayoría parlamentaria de Morena descalificó los cuestionamientos de sus adversarios: “Nosotros apoyamos la premisa que ha sostenido el Presidente de la República el pueblo pone y el pueblo quita y no tenemos miedo, pero observamos que este mecanismo ha generado temor en otras fuerzas políticas, bajo un discurso que confunde, y que además pretende considerar a los mexicanos como incapaces de reflexionar sobre su voto.
El argumento que han esgrimido sobre que Morena sería beneficiada en la elección intermedia si también se somete a consideración de los ciudadanos la revocación del mandato del Presidente, es un argumento falso, que no se sostiene”, indicó.
Con información de Milenio