El contralor general del Estado, José Gabriel Rosillo Iglesias, participó en la II Cumbre de Gobierno Abierto, organizada por el Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI) y el Núcleo de Organizaciones de la Sociedad Civil, en la Ciudad de México.
Rosillo Iglesias, durante el panel “Prácticas de gobierno abierto”, explicó los factores críticos que permiten mantener un ejercicio exitoso en el estado, empezando por el involucramiento y participación comprometida y efectiva por parte de la sociedad civil, generando espacios para la elaboración de propuestas y que estas sean atendidas y llevadas a la práctica de la forma más conveniente.
En su intervención, habló sobre como los comités institucionales de gobierno abierto (CIGA) en las dependencias y entidades, que han impulsado ideas de mejora en trámites y servicios a través de la participación ciudadana y la innovación tecnológica. Y destacó que San Luis Potosí es uno de los seis estados con mejores prácticas de gobierno abierto en el país.
El titular del Órgano Interno de control del gobierno del Estado indicó que las iniciativas de gobierno abierto han sido incentivadas a partir de la definición y formalización de estructuras, suficientemente soportadas por un marco legal apropiado, lo cual permitirá que permeen en toda la administración pública, y mencionó como ejemplos a la Comisión Estatal de Gobierno Abierto (CEGA), los Comités Institucionales de Gobierno Abierto (CIGAS) y la Red Potosina de Gobierno Abierto.
El Contralor General afirmó que, además de llevar a cabo la formación, difusión y capacitación en temas de Gobierno Abierto a funcionarios, se han creado mecanismos para reconocer e incentivar el desarrollo de iniciativas, como el caso del Premio San Luis Potosí de Gobierno Abierto que surge de una alianza estratégica entre la Contraloría General de Estado y la Cámara Nacional de la Industria de Transformación (CANACINTRA) SLP, que en su edición 2018 recibió 57 iniciativas surgidas el 44% de la sociedad civil y el 56% restante de instituciones gubernamentales.
“Cuando la sociedad encuentra los mecanismos para expresar sus ideas, aspiraciones e inquietudes, se siente reconocida por sus aportaciones, y se sabe atendida porque ve que sus aspiraciones se convierten en hechos concretos, se genera una espiral virtuosa que promueve una mayor participación, con mayor calidad, con mayor confianza mutua, que permite acceder a mejores ejercicios de colaboración capaces de atender retos más importantes de la sociedad y solucionarnos en forma co-creativa entre gobierno y ciudadanía”, concluyó Rosillo Iglesias.