La ausencia de fuertes lluvias en los próximos días permitiría que en la región de la Península de Yucatán puedan observarse todavía atardeceres rojizos, como consecuencia de la presencia de una nube de polvo proveniente del desierto del Sahara.
El astrónomo yucateco, Eddie Salazar Gamboa, indicó que en tanto prevalezca el cielo despejado y la ausencia de precipitaciones pluviales en la región, es muy probable que permanezcan suspendidas en el aire las partículas minerales que dan esa tonalidad rojiza a los atardeceres.
Por su parte, la Secretaría de Desarrollo Sustentable de Nuevo León informó que actualmente el Polvo del Sahara no representa riesgo en el incremento de las concentraciones de partículas en la entidad.
Asimismo, por el pronóstico meteorológico del Servicio Meteorológico Nacional, y de las mediciones que llevan a cabo las 13 estaciones de monitoreo del Sistema Integral de Monitoreo Ambiental (SIMA) de Nuevo León sobre las tendencias de las concentraciones de partículas de micras (PM10 y PM2,5).
¿HAY RIESGOS?
El polvo del Sahara está compuesto por arena y aerosoles dispersos – los cuales contienen además de material mineral, bacterias, hongos y virus-, que se generan en tormentas que se forman al Occidente de África.
Este fenómeno meteorológico puede provocar disminución en las lluvias sobre las regiones en las que se mueve en grandes cantidades, de hecho, podría inhibir la formación de ciclones tropicales.
Aseguró que las condiciones del Polvo del Sahara se presentan con mayor intensidad en verano, la cantidad de arena desplazada depende de la magnitud de las tormentas en el desierto africano.
Por ello, la dependencia llamó a los habitantes de la entidad a mantenerse informados sobre la calidad del aire en la Zona Metropolitana de Monterrey en la página aire.nl.gob.mx, y en las aplicaciones para dispositivos móviles.
Con información de : Publimetro