La policía del sur de Florida cree que podría haber una cibertestigo de un homicidio y la cuestión ahora es tratar de hacerla “hablar”.
Los agentes en Hallandale Beach descubrieron que un dispositivo de asistencia inteligente Amazon Echo o similar estaban en la casa donde una mujer fue asesinada en julio.
El dispositivo, apodado Alexa por la palabra usada como señal de alerta, podría haber escuchado y grabado más de una orden de compras en la vivienda de Silvia Galva y su novio, Adam Reechard Crespo, reportó el diario The Sun Sentinel. Galva falleció por un arpón en el pecho.
Crespo comentó a las autoridades que la muerte fue accidental. Él fue indiciado por posible homicidio doloso y fue puesto en libertad tras pagar una fianza de 65.000 dólares.
Las autoridades agregaron que Amazon entregó varias grabaciones, pero ni la compañía, la policía o la fiscalía del estado informaron su contenido.
AP.