Se develó el misterio. Soda Stereo demostró este pasado sábado, en el concierto de arranque de su gira Gracias Totales, acontecido en el Estadio Nemesio Camacho El Campín de la ciudad de Bogotá, que su legado musical, pese al paso del tiempo, continúa tan vivo y vigente en el cariño de sus muchos seguidores como el recuerdo de su líder Gustavo Cerati.
En una noche por la que desfilaron tanto en vivo como en imagen en pantalla los 15 cantantes que hoy acompañan a Charly Alberti y Zeta Bosio, baterista y bajista originales del afamado trío, Soda Stereo emprendió un intenso recorrido por las canciones que hicieron de ellos una de las bandas de rock más reconocidas en Latinoamérica.
A las 8:35 de la noche, las tres enormes pantallas sobre el escenario comenzaran a proyectar las imágenes que dan vida a Gracias Totales. Luego de una breve introducción en la que puede verse como alguien toma de un librero un video VHS con la grabación de un viejo concierto del grupo argentino, los acordes de “Sobredosis de TV” brotaron a todo volumen de los monitores. Sobre el escenario aparecieron tanto Alberti como Bosio, respaldados por Richard Coleman y Roly Ureta en guitarras, así como Fabián Quinteiro en teclados. Esa primera interpretación Soda la hizo con la imagen de Cerati apareciendo constantemente en la pantalla, y el sonido de su voz y guitarra en primer plano, dejando en claro desde el principio que el fallecido líder del grupo estaría presente a lo largo de la velada, en distintas ocasiones. Otra de ellas, quizás de las más emotivas del concierto, se daría casi a la mitad del mismo, cuando Soda Stereo irrumpió con “En la Ciudad de la Furia”, dejando también que fuese la voz de Cerati la que la entonara, mientras por las pantallas corrían imágenes en blanco y negro de Buenos Aires, la ciudad donde Soda surgió para la música.
Y es que Gracias Totales es una suerte de espectáculo que avanza ensamblando momentos musicales tocados por el grupo con imágenes históricas en las que se recuperan episodios clave o meramente anecdóticos en el desarrollo del trío; como por ejemplo, una sesión de fotografías hechas en las pirámides de Teotihuacán, México. Una vez que la primera canción llegó a su fin. Coleman, sin duda uno de los músicos más allegados a Soda Stereo, asumió el rol de vocalista para entregar “Hombre al agua”. La producción de Gracias Totales, valga destacarlo, confeccionó un impresionante despliegue de luces y proyecciones en pantalla, que son otro de los atractivos de su sofisticado diseño en general.
El primer cantante invitado en aparecer sobre el escenario fue el mexicano León Larregui, quien hizo suya una versión de “Disco Eterno”, cantada en su característico y sobrio estilo. Entre otros invitados presentes en el inicio de Gracias Totales, que tocará otras 14 ciudades a lo largo del continente, entre ellas Guadalajara el próximo 10 de marzo, la local Andrea Echeverri, ataviada con un vestido muy acorde a su creativa forma de ser, interpretó “Pasos”; Rubén Albarrán hizo lo propio con “Lo que sangra (La Cúpula)”, la chilena Mon Laferte, ya hacia la parte final del concierto demostró su poderosa voz con “Un millón de años luz” y Adrián Dárgelos, también allí presente, entonó “Trátame suavemente” para cerrar su participación con la frase: “Gracias Soda por una eternidad juntos.” Una vez que los músicos abandonaron el escenario, los créditos del espectáculo comenzaron a correr por las pantallas. Al final de los mismos, la frase: “Dedicado a la memoria de Gustavo Cerati” apareció para evocar una vez más la presencia de uno de los más venerados compositores de rock latinoamericanos.
Por Milenio