La Secretaría de Salud suministrará hidroxicloroquina a 20 mil pacientes ambulatorios de covid-19 en los institutos nacionales de salud y hospitales de alta especialidad a partir de la próxima semana, pues la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) autorizó el uso emergente del fármaco.
Por lo tanto ya se podrá usar fuera de ensayos clínicos, pero de manera controlada, reveló José Sifuentes Osorio, director médico del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán (INCMNSZ), tras recibir una donación de 130 mil dosis del medicamento genérico de Novartis.
“Lo que hemos convenido con el secretario (de Salud, Jorge Alcocer) es distribuirlo en las instituciones de la coordinación de los Institutos Nacionales de Salud, hospitales regionales, hospitales de alta especialidad y con instituciones de seguridad social”, dijo Sifuentes Osorio, luego de que la Organización Mundial de la Salud reiteró el miércoles que la hidroxicloroquina sólo debe usarse en estudios clínicos monitoreados por médicos, “debido a sus potenciales efectos secundarios”.
El experto explicó que los ensayos clínicos realizados hasta el momento han demostrado que la hidroxicloroquina tiene el beneficio de disminuir la inflamación generalizada que se presenta en las personas que se contagian, por lo que se utilizará en pacientes con fases tempranas de la enfermedad.
“Este es un medicamento que si se utiliza en fases tempranas tendría el beneficio, pero en un paciente grave que ya está hospitalizado y que ya está con mucha fiebre y datos francos de inflamación, este medicamento ya no es la mejor opción”. De tal forma, dijo que la Cofepris autorizó el uso emergente del fármaco como “un acuerdo secretarial” para su administración ordenada en cada uno de los centros médicos y manteniendo una vigilancia cuidadosa de los pacientes.
“Y esto se puede hacer, no sólo con el seguimiento presencial, sino incluso con el seguimiento a través del teléfono, las videollamadas se puede hacer ese seguimiento cuidadoso de esos pacientes”, apuntó.
José Sifuentes Osorio destacó que las personas contagiadas no deben automedicarse la hidroxicloroquina, ya que los riesgos van desde alergias, intolerancia gástrica y problemas cardíacos, además de otros riesgos en retina, cuando se utilizan dosis elevadas y por un tiempo prolongado, por lo que se prevé suministrar dosis bajas a medianas del fármaco a pacientes covid-19 por un máximo de 7 días.
“Es el tiempo propicio para disminuir el fenómeno inflamatorio que se mide con diversas pruebas en la sangre y que va demostrando, va revelando como la infección progresa y que ya no se queda solo en los pulmones, sino que se manifiesta en otros órganos también cómo puede ser los riñones los vasos sanguíneos”, explicó.
El director médico del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición dijo que la Secretaría de Salud determinó suministrar este fármaco, también debido a la percepción de la población contagiada, de que al asistir a las unidades de salud no se les atiende correctamente.
“La inmensa mayoría de las personas que sufren esta infección están muy preocupados, alarmados, todos ellos aunque tengan manifestaciones leves están ávidos de tener atención médica, y en este sentido, incluso por video se favorece el que haya ese seguimiento con sus médicos o con sus grupos médicos tratantes”.
“Esto es benéfico para mejorar el seguimiento de las personas, se ha visto cómo los pacientes cuando los entrevistan por la prensa escrita o la prensa televisiva, pues se quejan de eso, de que los vieron muy rápido, no se sabe ni qué pasó, de los que se hospitalizan este fenómeno complejo de pérdida del contacto que llegan a tener con sus familiares”, indicó.
Por Milenio