La falta de jardínes en la ciudad, la venta ilegal en mercados y su uso en prácticas como los amarres o la brujería, han puesto en peligro de extinción a los colibríes.
En México habitan 58 especies, de las 343 que existen a nivel mundial, y 18 se encuentran amenazadas; dos de las 343 ya están extintas: el colibrí esmeralda de Brace y el colibrí esmeralda de Gould.
Bárbara Peralta Zúñiga, asesora y consultora ambiental en Hermosillo, señaló que una de las principales amenazas para la conservación de los colibríes es su venta en el Mercado Sonora, en la ciudad de México, donde cuelgan cientos de ellos ya sin vida esperando ser utilizados para rituales de brujería y otros conjuros.
El colibrí se mata. Se le quita el corazón y se hierve en agua para después ser tomado como una poción. También se usa como amuleto, se considera místico o mágico. Así es como terminan siendo traficados y asesinados y es así también como ponen en peligro su existencia.Reproductor de audio00:0000:00Use las teclas de flecha arriba/abajo para incrementar o disminuir el volumen.
“El comercio ilegal es para estas cosas de brujería, podríamos decir culturales. Sobre todo en el centro del país, en la Ciudad de México, es el principal lugar de esto.
Hay muchos reportajes donde se ve que van hacia el mercado y se ven los colibríes colgados, amarrados, otros envueltos en ropa interior porque dicen que con eso puedes mantener siempre contigo a la pareja que te interesa”.
Desde civilizaciones antiguas se ha considerado a esta pequeña especie como un ave mística, aunque en aquél entonces no se utilizaba con los fines actuales. Ahora las creencias en rituales mágicos de amor son un principal enemigo.
Los colibríes solamente existen en América y son una de las aves polinizadoras más importantes. Aunque son pequeñas y ligeras, pues llegan a pesar un máximo de 8.5 gramos, su importancia es gigantesca.
Imagen: Sergio Müller
Estos pequeños seres vivos, son capaces de revolotear hasta 200 veces por segundo cuando cortejan a la hembra y es la única ave que puede volar hacia atrás, una vez que se alimenta del néctar de las flores.Reproductor de video00:0000:10
Sonora alberga alrededor de 16 especies de colibríes y aunque ninguna de ellas se encuentra dentro de las categorías de riesgo que clasifica la Norma Oficial Mexicana, hace falta investigación y monitoreo de las especies para conocer su estado actual, manifestó Peralta Zúñiga.
“Las especies de aquí no están todavía en riesgo, según las categorías que tiene la Norma pero hay 16 especies en Sonora.
En cuanto a la situación de conservación, sí falta mucha investigación al respecto. Hasta ahorita no hay especies en riesgo, solo una que es migratoria y tiene sus paradas en Sonora pero su categoría de riesgo es internacional, dentro de la lista roja”.
Zelenia Coronel Lara, investigadora de la Comisión de Ecología y Desarrollo Sustentable del Estado de Sonora (CEDES), aseveró en la institución cuenta con un proyecto de aviturismo donde se analiza la presencia de aves en diferentes municipios para crear un catálogo.
Sin embargo, coincidió en que hace falta monitoreo específico de las poblaciones de colibríes en Sonora para conocer cuáles pueden estar en riesgo y qué acciones deben emprenderse para cuidarlos.
En Hermosillo se ha observado al colibrí pico ancho, cola negra, cabeza roja, de costa, el zumbador canela y el zumbador de jade; estos dos últimos son parientes cercanos, migratorias que se reproducen en Estados Unidos y Canadá y vuelan a Sonora en el invierno.
Coronel Lara manifestó que la falta de jardínes en las casas hace difícil su alimentación, por eso se recomienda la creación de estos espacios verdes como una alternativa para preservar a los pequeños animales polinizadores. Este es otro factor que pone en riesgo su vida.Reproductor de audio00:0000:00Use las teclas de flecha arriba/abajo para incrementar o disminuir el volumen.
“Los estudios muestran que el cambio de la temperatura y la precipitación afectan la floración y esto impacta a colibríes y a otros polinizadores. De hecho, muchos viajan en un límite energético, se detienen en las ciudades pero no hay alimentos, no hay floración y mueren cuando llegan.
Se dice que un colibrí puede visitar entre 500 a 3 mil flores por día, aportan a la conservación de los ecosistemas por ser especies polinizadores, con una singular belleza y apreciada por los observadores de agua”.
¿Cómo podemos aportar al cuidado de estas aves desde nuestros distintos espacios como ciudadanos? El consejo principal es tener jardines con flores en nuestros hogares y el segundo es saber cómo crear los bebederos a los que llegan, a fin de beneficiarlos y no afectarlos.
Imagen: Sergio Müller
La preparación debe ser la siguiente : agregar una porción de azúcar blanca por cuatro porciones de agua, esta debe ser hervida y por ningún motivo se pueden agregar colorantes ni aditivos, tampoco azúcar morena, miel u otros endulzantes.
Agregar otro tipo de sustancias distintas al azúcar blanca, pone en riesgo la vida del colibrí, pues sus sistema no está preparado para procesar estos alimentos y, lejos de ayudarlos, se puede provocar su muerte.
Debido a su distribución, no se conoce con exactitud cuántos ejemplares de colibríes mueren cada año a manos del ser humano, pero lo que sí se sabe es que de seguir con estas prácticas, puede llegar a desaparecer pronto.
Con información de Proyecto Puente