El Penal de Puente Grande fue cerrado porque lo gobernaba el narco, aseguró el secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Alfonso Durazo.
El funcionario explicó que el penal mantenía un autogobierno y era un mito que se trata de una cárcel de máxima seguridad, por lo que se trasladó a los internos para sacarlos de su zona de confort.
“Los reos pertenecientes al Cártel Jalisco Nueva Generación, al estar en el penal de Puente Grande, es tener todas las condiciones para conservar el autogobierno, y parte del objetivo es precisamente dispersar a estos criminales para anular la posibilidad de que reproduzcan el autogobierno en otros penales”.
En la conferencia mañanera del 1 de octubre el presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que que el penal se cerraba porque se había privatizado el sistema penitenciario en otros gobiernos.
Según AMLO se trataba de poner orden en los penales federales para ahorrar tiempo y recursos y apoyar recintos locales en mal estado o condiciones de hacinamiento.
En un acuerdo publicado en el Diario Oficial de la Federación el 28 de septiembre se informó del cierre del Penal de Puente Grande, que albergó a internos como Héctor “El Güero” Palma, Ernesto Fonseca Carrillo y Joaquín “El Chapo” Guzmán.
Los internos fueron enviados a distintas cárceles del país, al igual que los custodios.
Con información de: SDPnoticias