Javier Padrón
Hace seis años Sonia Mendoza estaba en los cuernos de la luna como candidata del PAN a la gubernatura, hoy tiene un pie afuera, su salida del partido se formalizaría tras la elección interna que se avizora será ganada por Octavio Pedroza Gaitán.
La diputada lo admite, le llueven ofrecimientos para irse a otros partidos, desde antes de que se bajara de la contienda interna recibió ofertas tentadoras, las valora y tomará una decisión, no está cerrada, ya quemó sus naves en el PAN.
Lo cierto es que el capital político que llegó a tener se ha vuelto borroso, no ha recibido múltiples muestras de apoyo de la militancia, de solidaridad ante la injusticia de la que se dice víctima; por su dimisión hay fiesta en el edificio de Zenón Fernández.
Su equipo original se ha dispersado, sus operadores ya no figuran, Héctor Mendizábal optó por desaparecer luego de haber formado parte de la legislatura “más corrupta de la historia”, y Juan Pablo Escobar mejor renunció a 22 años de militancia y ahora es coordinador del precandidato independiente Arturo Segoviano.
Sonia se ha quedado sola, y por más generosa que sea la compensación de Xavier Nava por dinamitar la elección interna, le podrían otorgar una “pluri” federal por el PRD, no se va a arriesgar, ya fuera del PAN, que le dio todo, podría concluir su carrera política.
Como la coalición derechista “Sí, por San Luis Potosí”, fue diseñada para que la encabezara Nava, no Pedroza, su vigencia está en veremos, de ahí el pataleo del PRD; en el PRI también hay preocupación, solo que se abstienen de hacerla pública, y no tanto en Conciencia Popular, ya una vez hizo alianza con el navista Guillermo Pizzuto para la alcaldía y se conformó con una regiduría.
Así como se deshizo en un santiamén la coalición “Juntos Haremos Historia”, la de los partidos de oposición a la 4T va por el mismo camino, dieron como un hecho que Nava ganaría y desestimaron la fuerza y arraigo de Pedroza entre el panismo.
El escenario electoral que se prefigura hoy, aunque podría cambiar, es con Pedroza (PAN), Nava (PRD, PRI, CP), Ricardo Gallardo (PVEM, PT) y Juan Ramiro Robledo (Morena, Nueva Alianza). Faltan los candidatos de los partidos morralla (PES, Redes Progresistas) y los independientes que no serán más de dos; sobre la marcha la contienda será entre el PAN y Morena.