Felipe Morales
Sigue imperando la violencia y la sinrazón en el futbol llanero de San Luis Potosí que parece incontrolable; ahora le tocó a un silbante cuyo nombre omitieron las autoridades del futbol que ya tomaron cartas en el asunto.
Cristian Misael Pérez Rebolloso jugador del equipo “Atlético Celaya Amigos de Freddy” militante de la Liga Tangamanga en su categoría de Segunda División agredió y dejó severamente lesionado al arbitro del encuentro que el equipo sostenía el campo de la Delegación de Pozos.
Ante el hecho, la Asociación de Futbol Colegiado de San Luis Potosí por medio de su Delegado Estatal de Arbitraje Pedro Cadena emitió un oficio a los presidentes, coordinadores y directores de ligas y canchas de futbol en el que expone el suceso de la agresión al árbitro del Colegio Alianza San Luis.
En el documento boletina al citado agresor Cristian Misael Pérez y conmina a no permitir su participación en ninguna liga o cancha afiliada o no a la Asociación por el período de un año.
ANTECEDENTES
Han sido incontables los actos de agresión desde lo verbal hasta lo físico de integrantes de equipos (jamás deportistas) hacia los árbitros; y de las agresiones físicas desde empellones, corretizas, bofetadas hasta auténticas palizas, de un sólo individuo o en grupo.
Sujetos enervados por la ira de una decisión arbitral que les hace sentirse perjudicados y que arremeten contra alguien que practica el arbitraje y de paso ganar unos pesos.
Las agresiones han sido en el seno de todas las ligas, no se salva una; esta vez le tocó a la Liga Tangamanga que, irónicamente, lleva más de un año con una publicación fija en su página de Facebook donde aparece un video sobre el tema, donde se denuncia, y se clama por detener la violencia.
En julio de 2021 un sujeto integrante del equipo “Borrachos” en la liga El Volcán agredió a un árbitro al grado de enviarlo al hospital; el hecho provocó una huelga de árbitros por una semana en todas las ligas en reclamo de garantías para ejercer con seguridad el oficio.
El Delegado del Arbitraje Pedro Cadena culpó a “la falta de capacitación” y anunció acciones, cursos, etc. y se anunciaron además medidas y amago en sanciones que ni se han aplicado, y desde luego, no han funcionado.
Las medidas podrían incluir además de la tibia sanción de suspender a un agresor por un tiempo determinado, acciones legales, penales, puesto que se está incurriendo en lesiones de diversos grados hasta el intento de homicidio.
La frustración, la incultura, la falta de valores de la mayoría de los “futbolistas” del llano de todas las ligas hace mantener al gremio arbitral en una gran zozobra; la realidad de cada semana: no saber la forma cómo van a volver a su hogar después de “pitar” o simplemente no volver.