Marcela Loyola
La comunidad estudiantil de la Facultad de Ciencias Sociales y Humanidad de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí (UASLP), exige seguridad a las autoridades de Gobierno del Estado y del Ayuntamiento capitalino, para evitar más hechos lamentables.
A través de un comunicado, los universitarios exigen “atención a la seguridad por parte de las autoridades universitarias, estatales y a la alcaldía municipal, esto como consecuencia del fallecimiento de nuestro compañero de tercer semestre de la Licenciatura en Historia, que sucedió la noche del viernes 30 de septiembre del 2022 debido a los elevados niveles de violencia que han tocado las puertas de la Facultad de Ciencias Sociales y Humanidades, la cual se encuentra deslinda de cualquier grupo político o grupo estudiantil”.
Los quejosos aseguran que la inseguridad “representa una amenaza a la integridad de todos los estudiantes universitarios, por la baja calidad de protección aportada por la universidad, así como las instituciones de seguridad pública pertinentes. Ningún estudiante debería faltar a clases por encontrarse en medio de una situación de riesgo a causa de la violencia estatal”.
“Exigimos abrir un diálogo sobre la inseguridad del estado de San Luis Potosí, con todas las autoridades responsables de la protección de los estudiantes: Enrique Francisco Galindo Ceballos y Ricardo Gallardo Cardona. Así como un posicionamiento del rector, Alejandro Javier Zermeño Guerra, con respecto a los factores que ponen nuestra seguridad e integridad estudiantil en peligro dentro o fuera de las instalaciones, ya que esto nos afecta no solo como estudiantes universitarios, sino también como integrantes de la sociedad potosina merecedora de una dignidad válida y con el derecho de llevar la vida en paz”, sentencian.
Agregan que emplean el derecho de hacer presente en sus inconformidades con la inexistente efectividad de la investigación, la cual no se puede pasar por alto. “Si no obtenemos una respuesta efectiva a nuestra solicitudes, sin índole violenta, sino pacífica, nos veremos obligados a tomar las medidas que consideremos pertinentes para exigirla”.