Falta una semana para que comience el mundial del Qatar 2022. Esta edición será novedosa en muchos aspectos, ya que es la primera que se juega en invierno y además es una de las que mayores restricciones tendrá por la venta de bebidas alcohólicas.
Una de las incógnitas para los visitantes a Qatar es el precio de la cerveza, misma que será vendida por Budweiser y los primeros precios que aparecen en redes sociales ya ‘espantan’, esto debido a que con lo de una cerveza de 500 mililitros sale casi de los un ‘cartón’ de ‘caguamas’.
¿Cuánto costará la cerveza en el mundial de Qatar?
De acuerdo con Fox Sports México, “En una imagen que circula en redes sociales, se reveló que los espectadores podrán adquirir una cerveza regular por la módica cantidad de 50 riales qataríes (267 pesos mexicanos / 13.73 dólares estadounidenses)”.
Las cervezas sin alcohol se venderán por 30 riales qataríes (160 pesos / 8.24 dólares), mientras que una botella de 500 mililitros de agua costará 10 riales qataríes (53 pesos /2.75 dólares).
La odisea de Budweiser por llevar la cerveza a Qatar 2022
Los letreros comenzaron a aparecer a principios de este año: en Qatar Distribution Company, el único minorista de alcohol en el país musulmán conservador, un cartel enorme con la marca Budweiser con Lionel Messi estaba pegado en la entrada. Luego, más bares y restaurantes de Doha comenzaron a ofrecer Budweiser de barril.
Anheuser-Busch InBev Worldwide ha operado dentro de los límites de las estrictas leyes sobre el alcohol de Qatar durante años sin fanfarria. Ahora los ejecutivos buscan delicadamente maximizar el retorno de la inversión del contrato de patrocinio de la Copa Mundial de Budweiser, en un lugar donde los funcionarios locales de Qatar estuvieron a punto de prohibir por completo el alcohol en los eventos del torneo.
Abastecerse para la Copa Mundial FIFA 2022, que comienza el 20 de noviembre, ha sido una tarea monumental para la cerveza oficial de la Copa Mundial. La marca de bebidas espera que se consuma más cerveza durante el torneo de lo que normalmente ocurriría durante todo un año en el país, según Peter Kraemer, director de suministros de AB InBev.
Sin cervecerías en la región, la compañía tuvo que enviar su producto a Qatar por transporte marítimo y luego encontrar un espacio de almacenamiento refrigerado para protegerlo del clima ultra cálido del país, con temperaturas superiores a los 95 grados Fahrenheit (35 grados centígrados) hasta fines de octubre. Los camiones se cargarán durante la noche en el interior y luego se enviarán para entregar el producto al día siguiente en restaurantes y áreas de fanáticos donde se puede servir alcohol.
“La cerveza es un producto perecedero, por lo que siempre es mejor el día que se envasa”, dijo Kraemer a Bloomberg en una entrevista. “Gestionamos nuestra cadena de suministro muy de cerca por la cantidad de tiempo que tardan los productos en llegar del punto A al punto B, y luego también las condiciones en las que se envían preservan el sabor de la cerveza”.
Qatar no es un país seco, pero restringe quién puede comprar bebidas alcohólicas y dónde. La cerveza, el vino y el licor están disponibles para su compra en muchos restaurantes vinculados a hoteles de lujo, a un precio. Una cerveza de Budweiser cuesta entre 45 y 55 riales qataríes (entre 12 y 16 dólares) en los bares populares de West Bay, el centro de la ciudad.
El alcohol es un activo que hace que el floreciente destino turístico sea “moderno” en comparación con la sobria Arabia Saudita y, al mismo tiempo, es visto como un vicio que es un paso en una pendiente resbaladiza que conduce al hedonismo relativo de la cercana Dubái.
Con el permiso por escrito de sus empleadores, los residentes extranjeros que ganen más de 3 mil riales qataríes (816 dólares) al mes pueden solicitar una licencia para comprar vino, licor y cerveza del monopolio del alcohol, llamado Qatar Distribution Company, una subsidiaria de Qatar Airways. Es caro: una caja de Budweiser se vende al por menor por 188 riales (51 dólares).
Los problemas que traerán las bebidas alcohólicas en Qatar 2022
La embriaguez pública es técnicamente ilegal, punible con hasta seis meses de prisión y una multa de 3 mil riales, pero en realidad los expatriados de cuello blanco se emborrachan regularmente en los brunch de los viernes alimentados con alcohol, siempre y cuando permanezcan dentro de los límites de restaurantes selectos en hoteles caros.
Se puede ver a hombres qataríes vestidos con sus túnicas tradicionales dándose un gusto en los restaurantes de Doha, aunque los cantineros dicen que no sirven a mujeres con el vestido tradicional qatarí.
La Copa del Mundo amenaza con desbaratar este cuidadoso baile. Diplomáticos, particularmente de países de Europa y América, han planteado preguntas sobre cómo responderán las autoridades a los fanáticos intoxicados que traspasan las leyes sobre la decencia y el decoro en los espacios públicos.
Los organizadores qataríes inicialmente dijeron que querían que los eventos de la FIFA fueran sin alcohol, pero dieron marcha atrás. Ahora, algunas fanzones venderán “bebidas internacionales” y los fanáticos podrán comprar cerveza Budweiser dentro del perímetro del estadio, en áreas de cerveza designadas, hasta tres horas antes y una hora después de cada partido, pero no podrán tomar ellos en las gradas.
Kraemer dice que las decisiones de AB InBev sobre la cantidad de cerveza enviada al país se basaron en un extenso análisis de datos, pero su equipo tiene un plan de respaldo si los fanáticos beben mucho más de lo planeado. Han reservado paquetes de botellas y latas que están listas para ser llenadas en una cervecería en el Reino Unido y enviadas por vía aérea con poca antelación.
Mientras tanto, la compañía está tratando de capacitar a hasta 6,000 trabajadores de la ciudad para que sirvan su cerveza correctamente, con aproximadamente dos dedos de cabeza en la parte superior, y hacerlo de manera responsable. Una portavoz dijo que el esfuerzo de capacitación virtual será el más grande en la historia de AB InBev.
Los fanáticos no pueden traer bebidas alcohólicas al país. La seguridad del aeropuerto confisca el alcohol en el equipaje de los viajeros que llegan, por lo que los fanáticos sedientos tendrán que comprar alcohol una vez que lleguen.
QDC pidió a los restauranteros que hicieran pedidos de todo el alcohol que necesitarían durante el torneo con meses de anticipación, y los gerentes de hospitalidad dicen que ordenaron mucho, por temor a quedarse sin suministro y no poder reabastecerse.
Ha sido complicado aumentar la visibilidad de Budweiser, y cumplir con un acuerdo de patrocinio de la FIFA por valor de cientos de millones de dólares durante una década, sin alterar las sensibilidades conservadoras de algunos qataríes e incluso comprometer su capacidad para operar en el país.
En consideración a la prohibición de Qatar de la publicidad de bebidas alcohólicas, Budweiser’s limitó y modificó su marca. La marca limitará las menciones explícitas de Budweiser e incluso Budweiser Zero a “estadios en el vestíbulo exterior y donde tiene licencia para poder venderse, en restaurantes de toda la ciudad”, dijo Todd Allen, vicepresidente de marketing global de Budweiser.
La marca en y dentro del W Hotel, que Budweiser se hará cargo de los eventos y fiestas durante la copa mundial de la FIFA, se limitará a Budweiser Zero o al contorno de la pajarita de la marca sin guión.
Budweiser espera poder beneficiarse de un “segundo verano” de ventas elevadas de cerveza, pero no esperan que el mercado de Qatar impulse las ventas. Y los ejecutivos esperan que el logotipo de Budweiser, exhibido en las vallas publicitarias LED detrás de los jugadores, sea imperdible.
“Por lo general, las compañías cerveceras de la nación anfitriona ven un buen aumento del volumen y, lo que es más importante, los fanáticos compran las ofertas premium, lo que es bueno para las ganancias”, dijo Duncan Fox, analista senior de productos de consumo de Bloomberg Intelligence. Esta vez, la atención se centrará en maximizar la visibilidad en los grandes mercados de consumo de cerveza como Brasil, Estados Unidos, Reino Unido y gran parte de Europa occidental. Allí, AB InBev “publicitará Bud hasta la muerte durante 6 semanas”.
Con información de El Financiero