El café es una de las bebidas más importantes para muchas personas, ya que de esa manera comienzan a realizar las tareas diarias, sean del hogar, trabajo, la escuela o incluso si no se tiene pensado hacer nada y sólo disfrutar de su característico sabor. Precisamente por esto último resulta clave saber dónde guardar el producto de grano. Te contamos.
Y es que algunas personas suelen dejarlo en el refri, pensando que las bajas temperaturas ayudarán a conservar mejor sus propiedades y que no se verá afectado por los otros productos que ahí se guardan.
Pero esto es un error, ya que no se deben guardar el café en el refrigerador porque los granos son porosos y absorben los aromas de la comida, lo que podría hacer que tras sacarlo y prepararlo, tu taza tenga un sabor raro.
Además de que en ese lugar el producto puede envejecer más rápido. Por ello no conviene dejarlo ahí, pero si por algún motivo lo debes guardar en ese sitio, considera que perderás buena parte del característico sabor.
¿Cuál es el mejor lugar para guardar el café?
El mejor lugar para guardar el café de grano es un envase hermético o frascos de vidrio y dejarlo en un espacio cuya temperatura ambiente no sea superior a los 25 grados centígrados ni inferior a los 15 grados, donde no haya humedad ni le dé la luz ni el calor, recomienda la marca MyCoffeB
Si bien algunos empaques ya cuentan con abrefácil que lo mantienen cerrado, en caso de que al abrir la bolsa no se pueda cerrar por sí misma, puedes tapar la abertura con una pinza como las de la ropa o con un sujetador. De esta manera evitarás que se reduzcan o desaparezcan las propiedades del café.
De acuerdo con Philips, la marca de cafeteras y productos para el hogar, estos son algunos consejos para una mejor conservación de los granos de café:
- No los dejes en el refrigerador ni el congelador
- Guárdalos en un recipiente hermético
- Evita usar recipientes transparentes, pues la luz puede afectar el sabor
- Consérvalos en un lugar oscuro, lejos de la luz solar
- No los dejes cerca de lugares cálidos, como la estufa
Se recomienda moler los granos para cada nueva ocasión en la que vas a prepararte tu bebida, pues así te sabrá mejor el café; ya molido tiene una vida útil aproximada de entre tres y cinco meses, por lo que se recomienda beberlo lo antes posible.
Con información de RadioFórmula