La Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró el término de la emergencia por Viruela Símica, aunque en México no se decretó ese estado para el padecimiento, fue el 28 de mayo del 2022 que se registró el primer caso en el país, y en San Luis Potosí en agosto; hoy, tras el anunció de la OMS, el Secretario de Salud, Daniel Acosta Díaz de León dijo que en el Estado se confirmaron 12 casos, y no hubo defunciones.
Dijo que en total se enviaron al Instituto de Diagnóstico y Referencia Epidemiológicos Dr. Manuel Martínez Báez (InDRE) 35 muestras, 28 en 2022 y 7 en este año, de las cuales 9 fueron mujeres y 26 hombres, de los 12 confirmados uno se presentó en una mujer y 11 en hombres; en el país, el total de casos positivos es de 4 mil 10 y 26 defunciones.
El funcionario señaló que esta enfermedad era endémica en algunos países africanos, y en 2003 hubo algunos casos en Estados Unidos, pero en mayo de 2022 se registraron casos en todo el mundo y ahora, como el Covid-19, la viruela símica se queda como una enfermedad para estar monitoreando; los síntomas que caracterizan la enfermedad, son: fiebre, dolor de cabeza, agotamiento, dolores musculares, inflamación de los ganglios linfáticos, manifestándose en áreas del cuello, axilas, región inguinal, entre otras; lesiones en la piel, en forma de erupciones que suelen aparecer primero en cara y manos para después extenderse al resto del cuerpo, pero también pueden aparecer inicialmente en los genitales o en otras partes del cuerpo.
Se recomienda a quienes presenten sintomatología relacionada con la viruela símica no automedicarse y acudir a recibir atención médica; entre las medidas preventivas mencionó que se debe evitar contacto físico con personas infectadas o sospecha de enfermedad, incluyendo contacto sexual; evitar tocar los objetos o materiales con los que hayan estado en contacto los pacientes; lavarse las manos con agua y jabón o gel desinfectante y practicar el estornudo de etiqueta; aislamiento de los pacientes en casa; usar cubrebocas, tanto para los pacientes como para las personas que están a su alrededor; lavar la ropa, toallas y sábanas de la persona enferma y los utensilios para comer con agua tibia y detergente.