El cantante Joaquín Sabina ha recibido el alta hospitalaria tras su ingreso en la clínica Ruber Internacional a consecuencia de la caída que sufrió sobre el escenario.
Su mujer Jimena ha llegado a la clínica conduciendo su propio coche que ha acercado hasta la misma puerta del hospital.
La primera imagen que se ha visto del cantante ha sido muy tranquilazadora ya que se le ha podido ver fumando un cigarro y dando indicaciones con el pulgar hacia arriba de que todo marchaba bien desde el asiento del copiloto del vehículo. Joaquín Sabina ha salido en silla de ruedas del centro hospitalario y ha sido ayudado para entrar en el vehículo que le trasladaría a su casa.
El golpe ocurrió cuando Joaquín Sabina encontraba actuando en el final de su gira junto a Joan Manuel Serrat. La caída le provocó diversos traumatismos y un hematoma intercraneal y un derrame cerebral por el que fue operado al día siguiente.
Tras la intervención fue trasladado a la UCI y más tarde a planta. Después del primer parte médico ha sido su amigo y compañero, el autor de ‘Mediterráneo’ el encargado de informar a la prensa sobre cómo evolucionaba su colega.
El cantante catalán se mostró optimista desde el primer momento, pero pedía prudencia. Y aunque Serrat ha estado a su lado en todo momento, otro amigo, Benjamín Prado, era el encargado de dar el primer comunicado a la prensa: “Tiene una triple fractura en el hombro y le han extraído un hematoma, pero está bien. Se encuentra mucho mejor”.
Joaquín Sabina ha estado en todo momento acompañado por su mujer y sus hija Rocío y Carmela que han ido al hospital con mucha frecuencia.
ASÍ SUCEDIÓ
Fue el día 12 de febrero cuando el madrileño Wizink Center se paralizaba al perder de vista a su ídolo. Joaquín estaba sobre las tablas junto a Joan Manuel Serrat y este bolo cerraba su gira ‘No hay dos sin tres’.
La mala suerte quiso que un foco nublara la vista al cantautor, lo que provocó que tropezara y cayera al espacio que separa el escenario de la pista donde se concentran los fans, a pesar de que en el primer momento la caída no revestía gravedad, fue recogido en camilla y la actuación musical se cancelo. Finalmente, el artista era ingresado en el hospital Ruber Internacional y operado de urgencia al día siguiente.
Sobre su vuelta a los escenarios, todo indica que habrá que esperar. En una de las comparecencias ante la prensa de Serrat se le preguntaba al músico si su amigo Sabina había mostrado ganas de querer volver pronto dar conciertos y esto es lo que decía el autor catalán:
“Él esta cansado, cascado, con un porrazo de tres pares… con una fractura en el hombro y otros problemas en otros sitios y si realmente me dijera que está animado y con ganas de subirse al escenario, me preocuparía muchísimo. Está muy dolorido”. Ahora, su alta es símbolo de mejora y sus fans seguro que esperan pacientes su mejoría hasta el momento que puedan volver a disfrutar de su música en directo.
Por Look Diario