El gobierno de Filipinas ordenó a los policías y al Ejército disparar contra las personas que no respeten las reglas de la cuarentena de Covid-19.
“No dudo. Mis órdenes son para la Policía y el Ejército. En caso de problemas o de una situación en que la gente se pelee y sus vidas estén en peligro, dispárenles a matar”, advirtió el presidente Rodrigo Duterte el mismo en el que una veintena de personas de la barriada de San Roque, en Manila, protestaron sin permiso ante la policía para exigir ayuda oficial para salir adelante.
En un mensaje difundido a través de la televisión, el Ejecutivo aseguró que también castigarán a quienes ataquen a los médicos y trabajadores de la salud.
“Quienes causen problemas morirán de hambre en las cárceles”, señaló.
La manifestación de alrededor de unas 20 personas fue dispersada y la mayoría de ellas fueron detenidas por las autoridades.
La semana pasada, Duterte obtuvo poderes especiales del Congreso para lidiar con la pandemia mediante una ley que incluye la provisión de 4 mil millones de dólares para repartir entre 18 millones de hogares desfavorecidos del país.
Hasta ahora, Filipinas reporta 88 casos confirmados de Covid-19.
Por Eje Central