Javier Padrón
Cuando parecía tener ya todo amarrado el dirigente del PAN Juan Francisco Aguilar, volvió a enfrentar reclamos de militantes de Aquismón encabezados por Cuauhtémoc Balderas y le tomaron anoche el edificio con todo y el personal dentro; están inconformes con la postulación de Vicente González a la alcaldía, lo hacen alfil de la priista Yolanda Cepeda, exalcaldesa y candidata a diputada local, muy cercana al gobernador Carreras.
Como no fueron atendidos por Aguilar ni habrá un cambio de decisión, Balderas y los suyos dejaron el edificio y le hicieron una visita de cortesía al candidato del PVEM, Ricardo Gallardo, el amago de otra deserción masiva, ¿será la última?
Temprano, por acción u omisión Aguilar dejó que la directiva de acción juvenil del partido lo propusiera como candidato a diputado local plurinominal y en la primera posición por sus méritos en la dirigencia, nadie rechaza tres años de confort sin ningún esfuerzo.
Esta manipulación de la juventud panista deja mal parado a Aguilar, así trata de justificar su auto designación y su falta de palabra, se había comprometido ante notario público no buscar un cargo en este 2021, se lo recordó claridoso en las redes sociales Jorge Lozano Soto, su rival en la contienda por la dirigencia hace casi tres años.
Soto fue el gallo de Xavier Nava y esa elección fue su primera derrota. Detrás de Aguilar, está el diputado federal Xavier Azuara que salió con una mano muy dura, ya se ha curtido en la intriga, en el juego de sombras y fue quien echó a Sonia Mendoza y otros del partido, sí se ha mermado la militancia y simpatizantes de manera significativa en estos tiempos confusos de partidos sin identidad ni vergüenza.
En los demás partidos de la coalición Sí por San Luis Potosí no han brotado disidencias, todos parecen estar muy conformes con el reparto de candidaturas. Con la lista de candidatos de mayoría al Congreso del Estado, se ve que la próxima Legislatura será una copia de la actual y anteriores, no hay esperanzas ni de un leve cambio.
Los candidatos de la alianza conservadora que buscan la reelección, Rubén Guajardo, Mauricio Ramírez, Patricia Silva Celis y Ricardo Villarreal, creen merecerla y sus partidos se las concedieron, solo falta que ganen en las urnas, el votante premia o castiga, ellos lo saben y decidieron correr el riesgo.
Para el distrito I, el PRI rescató del retiro al exdiputado federal Alfonso Nava, en Matehuala una parte del priismo, con el alcalde Jano Segovia, se fue al PVEM gallardista; y no encontraron a otro dispuesto a entrarle, el tricolor está desarticulado en el Altiplano. Otra carta priista que —se decía— también se iba a pintar de verde, el exalcalde Everardo Nava Gómez, fue tentado y aceptó la Subsecretaría de Enlace Interinstitucional que le ofreció el gobernador Carreras.
Mesa Revuelta/Un Congreso reciclado
