Astrónomos británicos han descubierto un arco de galaxias que se extiende por 3.300 millones de años luz, aproximadamente el 3,5 por ciento del universo observable. Si la estructura resulta ser real, desafiaría uno de los principios básicos de la cosmología: que a gran escala, la materia en el universo se distribuye uniformemente sin importar dónde se mire, reseña New Scientist.
“Derrocaría la cosmología tal como la conocemos”, aseveró la cosmóloga Alexia López de la Universidad de Central Lancashire (Reino Unido) en una conferencia de prensa virtual de la Sociedad Astronómica Estadounidense. “Nuestro modelo estándar, por no decir demasiado, falla”.
López y sus colegas descubrieron la supuesta estructura, a la que llaman simplemente Arco Gigante, al estudiar la luz de unos 40.000 quásares capturados por el proyecto de investigación Sloan Digital Sky Survey.
‘Firmas’ de los átomos
Los quásares son los núcleos luminosos de galaxias gigantes tan distantes que parecen puntos de luz. Mientras se dirige a la Tierra, parte de esa luz es absorbida por átomos dentro y alrededor de las galaxias en primer plano, dejando ‘firmas’ específicas en la luz que finalmente llega a los telescopios de los astrónomos.
La ‘firma’ del Arco Gigante está en los átomos de magnesio que han perdido un electrón. La luz del quásar absorbida por esos átomos traza una curva casi simétrica de decenas de galaxias que abarcan aproximadamente una quinceava parte del radio del universo observable, detalló López.
El equipo realizó tres pruebas estadísticas para calcular las probabilidades de que las galaxias se alinearan en un arco gigante por casualidad. Los tres sugieren que la estructura es real, con probabilidades de que sea una casualidad estadística inferiores al 0,00003 por ciento.
Con información de RT