Elon Musk fue demandado este martes por exaccionistas de Twitter que afirman que se perdieron la reciente subida del precio de sus acciones porque esperó demasiado para revelar un 9.2 por ciento de participación en la compañía de redes sociales.
El director general de Tesla y SpaceX tenía que presentar los documentos de la compra de acciones de Twitter antes del 24 de marzo, 10 días después de que su participación en Twitter aumentara al 5 por ciento, de acuerdo con la Comisión de Bolsa y Valores (SEC, por sus siglas en inglés) sin embargo lo hizo el 4 de abril.
Expertos bursátiles han señalado que al retrasar y caracterizar erróneamente la divulgación de su participación en Twitter, Musk compró las acciones más baratas, ahorrándose 143 millones de dólares según una estimación. Una ganancia que se habría producido a expensas de otros accionistas.
El lunes, Elon Musk reveló que había abandonado un plan para unirse al directorio de Twitter, justo cuando estaba a punto de comenzar su período, en la más reciente maniobra del hombre más rico del mundo que desafía las normas corporativas.
Musk reveló la semana pasada que había aceptado un puesto en el directorio de la red social, en contradicción con una presentación regulatoria que había publicado un día antes en la que se describía a sí mismo como un inversor pasivo.
Fuentes dijeron a Reuters en ese momento que Musk pidió a Twitter un puesto en el consejo de administración semanas antes de que la empresa de redes sociales aceptara el acuerdo.
Musk y Twitter no revelaron el motivo del cambio de rumbo. Musk dijo en una presentación regulatoria el lunes que ahora podría aumentar su participación del 9.1 por ciento en Twitter o empujar a la compañía a buscar operaciones, aunque no tiene planes en este momento.
No hubo ninguna señal de que a Twitter le preocupe la inminencia de una oferta hostil por parte de Musk. Al anunciar la noticia, Twitter no reveló ningún plan de derechos para los accionistas, conocido como “píldora envenenada”, que forzaría la dilución si Musk intenta aumentar su participación por encima de un determinado umbral.
No obstante, el presidente ejecutivo de Twitter, Parag Agrawal, advirtió a los empleados de Twitter en un tuit el domingo de que “se avecinan distracciones”, una posible referencia a las críticas de Musk a la empresa a través de tuits. Añadió que creía que la retirada de Musk era “para mejor”.
Un portavoz de Twitter no respondió a una solicitud de comentarios.
Las acciones de Twitter subían un 2.6 por ciento a 47.48 dólares en las operaciones de la tarde del lunes en Nueva York. Los papeles han aumentado más de un 20 por ciento desde que Musk reveló su participación en Twitter el 4 de abril.
Analistas de Wall Street dicen que la participación de Musk atrajo a legiones de inversores minoristas a la acción.
No está claro si fue una consideración para Elon Musk, cuyo patrimonio neto está calculado por Forbes en 274 mil millones de dólares. No fue posible contactarlo para que hiciera comentarios.
Musk borró el lunes muchos de los tuits que publicó durante el fin de semana sobre la plataforma de redes sociales, sin que esté claro qué le llevó a hacerlo. Los tuits iban desde un llamado a eliminar la publicidad en Twitter hasta la eliminación de la letra “w” en el nombre de la empresa.
Jacob Frenkel, antiguo abogado de la Comisión de Valores de Estados Unidos, dijo que la marcha atrás de Musk era poco convencional pero no parecía violar ninguna norma.
“El mero hecho de recibir una oferta para formar parte del consejo de administración, considerar la posibilidad de hacerlo y decidir no hacerlo no es una violación de las leyes de valores”, dijo Frenkel sobre la participación de Elon Musk, director general de Tesla y SpaceX, en Twitter. Un portavoz de la SEC no quiso hacer comentarios.
Con información de Radio Fórmula