Marcela Loyola
El director general del IMSS, Zoé Robledo Aburto culpó a los procesos obsoletos por la falta de medicamentos para los derechohabientes, pues dijo que hay un abasto del 94 por ciento pero por problemas de comunicación interna no se surten las recetas completas.
Así lo dijo en su visita de este viernes a San Luis Potosí para reunirse con el gobernador Ricardo Gallardo Cardona, quienes hablaron sobre la federalización de los servicios de salud, y recibir un informe por parte de la Delegación Estatal sobre la vacunación contra el Covid-19.
Zoé Robledo dijo que en la gira que realizó este día estuvo analizando asuntos de abasto de medicamentos, “hoy tuvimos una reunión regional Durango, Zacatecas, San Luis Potosí, porque comparten distribuidores y uno de los planteamientos es que no son problemas de abasto sino que por una mala comunicación interna las personas se van con una receta sin surtir”.
Indicó que estuvo analizando los porcentajes de recetas que no se entregaron de forma completa, “y pues estamos trabajando en ello y estamos revisando muchos procesos que a veces llevan años sin actualizarse y que funcionar de forma más eficiente, y es una de nuestras prioridades porque el IMSS tiene un 94 por ciento de abastecimiento de medicamentos”.
El director general del IMSS dijo que continúan con la atención del Covid-19, pero deber seguir la atención en otros padecimientos que son igual de importante, y también están trabajando en la idea o el sueño del presidente Andrés Manuel López Obrador de tener un mismo sistema de salud para todos los mexicanos.
Añadió que para esto primero se debe hacer un levantamiento de la situación actual de salud en el estado, el cual comenzará el próximo mes de mayo, y posteriormente se podrán tomar decisiones como podría ser que el IMSS Bienestar opere el nuevo Hospital Central, el cual ni ha podido ser equipado.
Agregó que actualmente el IMSS Bienestar opera el hospital de Los Hernández y un hospital comunitario en Axtla, en los cuales se busca contar con especialistas en pediatría, ginecología, medicina interna, urgencia y medicina familiar para cubrir los grandes rezagos de médicos, “hospitales comunitarios que no cuentan con la plantilla completa”.