Las fuertes lluvias registradas en diversos municipios de San Luis Potosí a consecuencia de los canales de baja presión del noreste, norte, centro y del sureste de México, en combinación de la humedad de ambos litorales y del huracán Kay, no han dejado afectaciones que pongan en riesgo a la población, dio a conocer el titular de la Coordinación Estatal de Protección Civil (CEPC), Mauricio Ordaz Flores.
Precisó que atendiendo la indicación del Gobernador de San Luis Potosí, Ricardo Gallardo Cardona, de proteger la integridad de las y los potosinos, la dependencia reforzó las acciones de coordinación y comunicación estrecha con las direcciones de protección civil de los 58 municipios, así como trabajos de campo para detectar riesgos y actuar de manera anticipada con lo que se previenen situaciones de riesgo.
Comentó que, en coordinación con la Secretaría de Turismo, todos los parajes turísticos de la Huasteca se mantienen cerrados para actividades acuáticas y solo están abiertos para apreciación visual, siempre que las y los turistas sean acompañados por un guía “las condiciones de lluvias más fuertes las tenemos pronosticadas este miércoles y jueves, por lo que posiblemente si las condiciones climatológicas mejoran podrían abrirse nuevamente al público para el fin de semana”.
Informó que los niveles de los ríos en la Huasteca han tenido un incremento en sus niveles; sin embargo, ninguno se encuentra en condiciones de riesgo para las personas que habitan cerca de estos cuerpos de agua y en algunas zonas urbanas se han presentado encharcamientos por colapso de drenaje, situación que han atendido las autoridades municipales.
Señaló que en coordinación con los ayuntamientos se han atendido deslaves en algunas carreteras, además de que se apoya con el retiro de piedras o escombros de los arroyos para evitar accidentes vehiculares.
Finalmente, reiteró el llamado a la población, evitar transitar o cruzar zonas inundadas, mantenerse alerta y atender las recomendaciones de Protección Civil y con lluvias y tormenta eléctrica buscar un refugio o bien no salir de la casa.