El saqueo de propiedades abandonadas en la capital potosina parece volverse cada vez más sistemático y masivo, ya que se ven casos no solamente de casas habitación, sino también de residencias, negocios y hasta edificios en cualquier rumbo de la ciudad.
Sobre la avenida de Jesús Goytortúa, al sur poniente de la ciudad, el edificio que se ubica en las cercanías de un centro comercial, no deja de sufrir el embate de vándalos y saqueadores que se introducen al inmueble a cualquier hora del día o de la noche, a sabiendas de la poca vigilancia que hay en el sector.
Estas oficinas comenzaron a ser saqueadas hace ya tiempo, pero no se había llegado al extremo de que también los marcos de las ventanas, compuestos de aluminio y plástico, fueran desprendidos de sus marcos para hacer más “choncho” el botín de los ladrones.
Desde el exterior, es visible que ya varios pisos del inmueble carecen de los marcos de ventanas que alguna vez tuvieron. Además de eso, la propiedad ha sido desprovista de todo el cableado eléctrico y demás elementos susceptibles de ser vendidos por kilo.
En este caso, resulta paradójico que una firma que terminó despojando a cientos de personas de su patrimonio, termine saqueada por la gente más urgida por obtener un ingreso para la diaria supervivencia.
Con información de: Pulso