Un equipo de investigadores de la Universidad de Wisconsin, en Estados Unidos, ha descubierto una bacteria común para repelente de mosquitos. Los tres científicos que conforman este grupo son Mayur K. Kajla, Gregory A. Barrett-Wilt y Susan M. Paskewitz.
Según su estudio publicado en la revista “Science Advances”, explican que estos compuestos, purificados a partir de extractos de la bacteria denominada “Xenorhabdus budapestensis“, parecen funcionar a dosis más bajas que los repelentes comerciales.
Xenorhabdus budapestensis es un tipo de bacteria que se instala en los gusanos presentes en el suelo.
Para llevar a cabo este estudio, el equipo impregnó con las bacterias una gasa que cubría el suministro de sangre artificial con el que se alimenta a las colonias de mosquitos. Su objetivo principal era que estos mosquitos ingirieran las bacterias para poder comprobar si tenían algún impacto en ellos.
Sin embargo, se percataron que los mosquitos eran bastante reacios a la presencia de estos microorganismos. Por lo que, descubrieron que las altas concentraciones de la sustancia química en la gasa funcionaban perfectamente como repelente para insectos. Por otro lado, las concentraciones más bajas, evitaban que los mosquitos bebieran la sangre artificial.
“No lo hicimos pensando que encontraríamos un repelente, fue un poco casualidad”, declaró Susan Paskewitz, en un comunicado publicado por la Universidad de Wisconsin.
Los científicos todavía no están muy seguros de cómo funciona esta sustancia química para ahuyentar a los mosquitos. Sin embargo, concluyen que puede ser porque tiene un mal sabor.
Paskewitz y Kajla ahora están colaborando con colegas de la Escuela de Medicina y Salud Pública de Madison para probar estas sustancias químicas en un cultivo de células humanas. Ya que, algunos de los trabajos preliminares sugieren que puede haber cierta toxicidad.
Este repelente de mosquitos podría ser efectivo contra especies de mosquitos que transmiten enfermedades como Zika, malaria y fiebre de Chikungunya.
Con información de National Geographic.