Científicos que trabajan en Madeira, una isla volcánica de Portugal en aguas al noroeste de África, han identificado un nuevo tipo de contaminación en el mar: pequeños trozos de lo que parece plástico derretido incrustado en las rocas a lo largo de la costa.
La primera vez que los científicos se percataron de esta “costra de plástico” fue en 2016, cuando vieron pequeños parches de color azul y gris. Ahora reportan que el área que abarca los trozos ha aumentado significativamente desde entonces.
Las pruebas muestran que el material es polietileno, el plástico más utilizado a nivel mundial.
En una parte específica de la costa, las costras quedan expuestas con la marea baja.
Los científicos del Centro de Ciencias Marinas y Ambientales de Portugal no saben todavía de dónde viene el plástico ni cómo podría afectar a la vida marina.
Con información de: La Jornada