A través de un comunicado, General Motors (GM) informó que a partir de este lunes su planta Motores y Transmisiones instaladas en el Complejo de Ramos Arizpe cesarán operaciones de manera indefinida, a raíz de la falta de provisión de componentes para su producción.
La empresa señaló que se trata de un paro técnico parcial del motor GEN y transmisión CV7. A su vez, reportó que la planta de ensamble en la que se genera el Chevrolet Blazer y Equinox opera de manera habitual.
Cabe señalar que la población total de este espacio industrial es de 5 mil 400 elementos de los cuales 415 se verán directamente afectados por esta acción, al irse a paro técnico parcial. Asimismo GM agregó que sus operaciones en San Luis Potosí y Toluca se desarrollan con regularidad.
Ante esto, Ramos Arizpe se suma al Complejo de Silao, que en fechas recientes también detuvo actividades, derivado de la huelga que el sindicato United Auto Workers, mantiene en Estados Unidos.
EMPEORA NEGOCIACIÓN PARA ACABAR HUELGA DE GENERAL MOTORS EN ESTADOS UNIDOS
Asimismo, las negociaciones laborales para poner fin a la huelga de 21 días de los trabajadores de General Motors sindicalizados con el United Auto Workers han empeorado, topándose con un problema imprevisto por garantías para elaborar productos en fábricas estadounidenses, dijo un funcionario del gremio en un mensaje electrónico enviado a los sindicalizados.
El sitio web de El Siglo de Torreón publicó que la carta de Terry Dittes, vicepresidente del gremio UAW, pone en duda si habrá un acuerdo rápido sobre la disputa contractual, que desató la huelga de 49,000 trabajadores el 16 de septiembre, afectando las plantas de GM.
La misiva de Dittes dice que el sindicato presentó una propuesta a la empresa el sábado. Agregó que GM respondió el domingo por la mañana con una propuesta que ya había sido rechazada e hizo pocos cambios.
La propuesta de la compañía no hizo nada para abordar una serie de asuntos, escribió Dittes, especialmente sobre la seguridad laboral durante el período de cuatro años que dura el contrato colectivo.
Durante las negociaciones contractuales, el gremio generalmente procura que la empresa se comprometa a fabricar nuevos vehículos, motores, transmisiones y otros productos en fábricas estadounidenses representadas por el sindicato.
“No hizo nada para ofrecer seguridad laboral durante el período de este acuerdo”, escribió Dittes. “Nosotros, en este sindicato, no podíamos estar más decepcionados con General Motors, que se negó a reconocer la experiencia y el talento de nuestros afiliados”.
En un comunicado, GM dijo que sigue negociando de buena fe “con muy buenas propuestas que benefician a los empleados ahora y construye un futuro más fuerte para todos nosotros”.
La compañía dijo que está comprometida a negociar sin parar hasta resolver la disputa.
Pero Dittes escribió que si bien ambos lados lograron avances en asuntos importantes hace dos días, las negociaciones “ahora han empeorado”.
Una persona enterada de las negociaciones dijo el domingo que el gremio manifestó estar preocupado por la creciente producción de GM en México, donde ahora fabrican camionetas tipo pick-up, carros compactos y dos tipos de camionetas SUV. La fuente, quien habló bajo condición de anonimato porque las conversaciones eran privadas, dijo que ambos lados están lejos de ponerse de acuerdo sobre las garantías de fabricación de nuevos productos en fábricas estadounidenses. (CON INFORMACIÓN DE OMAR SOTO, EL SIGLO DE TORREÓN Y AP)