La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) pidió a las autoridades federales y estatales, además de penitenciarias, para que frente a la pandemia de coronavirus se garanticen de “manera emergente” condiciones de seguridad, higiene y salud a los miles de presos que hay en los reclusorios y centros de internamiento en el país.
La comisión solicitó la “aplicación de medidas urgentes de control y mitigación de riesgos en el Sistema Penitenciario Nacional”.
Incluso, pidió el análisis de algún “mecanismo de preliberación, se diseñe un programa de seguimiento y monitoreo técnico de las personas que accedan a él, con la finalidad de garantizar que las personas se estén reinsertando socialmente de manera efectiva y no se reincida en la comisión de un delito”.
El pronunciamiento ocurre después de que organizaciones de la sociedad civil solicitaron al gobierno federal medidas sanitarias y de preliberación a favor de los presos, incluidos los migrantes que están internos en estaciones.
En un comunicado, la CNDH, manifestó su preocupación por “la situación en la que se encuentran los centros de readaptación social a nivel nacional, lo que se agrava por las condiciones actuales ante la pandemia por covid-19”.
Y anticipó que de no actuarse a tiempo “el Estado mexicano tendría que enfrentar y asumir los impactos que se vayan presentando ante las eminentes violaciones a los derechos humanos que enfrentarían dichas personas”.
En su pronunciamiento, la CNDH también exhortó a que se diseñe y ejecute un programa para que se acondicionen unidades médicas y hospitalarias, llevar la atención integral y seguimiento preciso de control de casos positivos y sospechosos.
Además de que se analice la posible reclasificación de las personas privadas de la libertad “para que, de ser procedente, con las medidas de seguridad necesarias para tal efecto, sean trasladadas de forma temporal a establecimientos estatales o federales que cuenten con capacidad instalada para albergar y en su caso, dar atención hospitalaria, a fin de disminuir el hacinamiento y cumplir con las medidas de higiene básica”.
La CNDH reconoció que todos los centros penitenciarios del país tienen “deficiencias en la infraestructura en el sistema de salud que enfrentan, la carencia de personal médico y medicamentos especializados, la alta densidad poblacional de los establecimientos, la sobrepoblación, el hacinamiento en el que conviven las personas”.
Por Milenio