“Dejar a la suerte paz y seguridad de las familias potosinas, lamentablemente, ya es un sello del Gobierno Federal, no hay una estrategia de seguridad ni de coordinación; están en campaña electoral de forma permanente y urgen acciones y resultados para cambiar esta realidad”
Esto fue declarado por la presidenta del PAN, Verónica Rodríguez, quien indicó que la Federación ha fallado en la estrategia para combatir el crimen, y eso lo vemos reflejado en nuestras calles, ya que hoy realmente la estrategia de “abrazos y no balazos” ha sido ineficaz y el castigo presupuestal a Estados y municipios en materia de seguridad ha empeorado la situación.
Esto fue declarado por la presidenta del PAN en el Estado, Verónica Rodríguez Hernández, quien apuntó que si desde la Comité contra las Desapariciones Forzadas de la ONU ya han calificado la estrategia de seguridad de México como “insuficiente e inadecuada” debe propiciar un cambio total en la estrategia.
Apuntó que la situación de inseguridad se ha agravado considerablemente desde la eliminación de los recursos a las policías locales, pues desde el 2021 que se eliminó el subsidio para el Fortalecimiento de la Seguridad en Entidades Federativas y Municipios (FORTASEG) crecieron más de 10% los delitos en México, es decir, se cometieron 558 los delitos más al día.
Rodríguez Hernández remarcó que en conjunto con la Asociación de Alcaldes, impulsarán la propuesta para que se regrese el FORTASEG y se destinen 10 mil millones de pesos más a reforzar a las policías municipales, pues enfatizó que debe fortalecerse la prevención, el equipamiento y la infraestructura de la seguridad en el nivel local.
La líder panista dijo que el trabajo conjunto es indispensable, por lo que se debe apostar a la coordinación entre los tres niveles de Gobierno, pues la estrategia fallida de “abrazos, no balazos” han provocado un aumento significativo en la percepción de inseguridad y dichas omisiones afectan el desarrollo de regiones en San Luis Potosí
Finalmente, dijo que el Gobierno Federal debe dejar de echar culpas y plantear una nueva estrategia porque son las familias quienes no tienen tranquilidad, ni confianza para disfrutar en paz este periodo vacacional, pues hay carreteras inseguras, y episodios de violencia a plena luz del día.