Marcela Loyola
Madres cuidadoras potosinas de hijos con discapacidad, se manifestaron fuera del Poder Judicial del Estado, para exigir que sus juicios se resuelvan a la brevedad, puesto que hay algunos hasta con siete años sin sentencia o resolución; por esta razón presentaron tres quejas.
Mariana Noriega, presidenta de Cuidadoras Potosinas, puntualizó que, fue una manifestación pacífica “porque desgraciadamente la mayoría de las madres cuidadoras que estamos en juicios pendientes de pensiones alimenticias o incidentes de aumentos de pensiones alimenticias no hemos sido escuchadas”.
Expuso que, su juicio acaba de cumplir siete años sin tener una sentencia, “es un juicio de incidente de aumento en la pensión alimenticia de mi hijo con discapacidad y mi hija sana de 14 años. Siete años es más de la mitad de vida de mi hijo que ya va a cumplir 10 años de edad y que prácticamente me la he pasado batallando en estos juzgados donde muchas madres cuidadoras pelean esas sentencias”.
La activista dijo que, la finalidad de manifestaron es exigir que los jueces dejen de ejercer violencia institucional, “que los secretarios de acuerdos y magistrados se pongan a hacer su trabajo y dejen de hacerse tontos, prácticamente estamos siendo criminalizadas y victimizadas”.
Puntualizó que, los menores que tienen una discapacidad son mayormente vulnerables que un menor sano “porque requieren de terapias, medicamentos, rehabilitación, requieren tratamiento médico multidisciplinario que es carísimo y para acabarla de complicar el panorama de las cuidadoras es no poder acceder a trabajos remunerados la mayoría porque tenemos que estar en casa cuidándolos, entonces no hay ingresos, prácticamente tenemos que vivir de las pensiones alimenticias, no es por flojera, no es porque no queremos trabajar porque pareciera que los juzgados familiares no entienden eso, es porque si salimos a trabajar debemos de dejar solos a nuestros niños y adultos mayores en estado de indefensión para poder cumplir con un trabajo remunerado”.
Afirmó que, sus hijos se han mantenido vivos y con calidad de vida gracias a su trabajo de cuidados “porque aunque los padres no den la pensión alimenticia, las madres hacen un esfuerzo para atenderlos y cuidarlos, vendiendo lo que se puede, cuando se puede, para poder solventar los gastos porque obviamente no hay salario que alcance”.
Mariana Noriega dijo que, hacen responsables a los jueces, “sobre todo el juzgado quinto familiar porque ha sido un juzgado omiso para meter sentencias o incidentes de pensión alimenticia, en el caso de mi hijo con parálisis cerebral y epilepsia que ha sobrevivido con cuidados por siete años, responsabilizo a los jueces del juzgado quinto familiar que en 7 años ha habido muchos movimientos de jueces y, no ha habido una constancia, ninguno ha sido capaz de fajarse los pantalones y hacer su trabajo de priorizar el interés superior de los niños y el secretario de acuerdos ese es el mismo, el licenciado Brauna, lleva desde que inició mi juicio y prácticamente desde ahí viene la cadena de omisiones y responsabilidades”.
Denunció qué, están viviendo violencia institucional, vicaria, psicológica las cuidadoras y sus hijos, “hoy se presentan tres quejas formales y seguimos elaborando quejas, la mayoría de las quejas se concentran en el juzgado quinto familiar y hay otras en el tercero y en el primero, pero coincidentemente en el quinto familiar son las quejas que tienen un periodo más largo sin que se emitan sentencias y estamos hablando de menores con discapacidad, con todas las discapacidades que son altamente dependientes y están en situaciones extremas de peligro de supervivencia”.