En un hecho sin precedentes y después de 36 años, en sesión extraordinaria virtual, en donde estuvieron presentes el rector Alejandro Javier Zermeño Guerra, el secretario general Marco Antonio Aranda, y los 55 miembros del H. Consejo Directivo la Universidad Autónoma de San Luis Potosí, se aprobó por unanimidad el nuevo Estatuto Orgánico Universitario.
El rector Alejandro Zermeño Guerra dijo que con este nuevo Estatuto, la Universidad Autónoma de San Luis Potosí es más incluyente, “su lenguaje lo hace más participativo, porque es un lenguaje incluyente”.
Puntualizó que ahora la Universidad da la oportunidad de ser más transparente y con mayor apertura, “ahora tenemos una nueva forma de elegir al rector, una vez que lleguen los tiempos, cualquier universitario que cumpla con los requisitos podrá presentar su solicitud en tiempo y forma, para que el Consejo Directivo Universitario realice las sesiones necesarias para escuchar todas las solicitudes en igualdad de condiciones y así después de conocer todas las propuestas, votar por la mejor, eso mismo sucederá con los directores, en donde los Consejos Técnicos integrarán la terna”.
Agregó que en lo que se refiere a los consejeros maestro y consejeros alumnos van a tener la particularidad de que las duplas siempre estarán integradas por un hombre y una mujer, “logrando ser así más equitativos”.
Reafirmó que está trabajando para cumplir con todas las propuestas de su plan de trabajo, “en siete meses se ha avanzado, se está trabajando en la creación de la Secretaría de Vinculación Social que tenga más nexos entre la UASLP y la sociedad, en donde exista un beneficio mutuo, este año creamos el nuevo protocolo para la prevención de acoso y hostigamiento, la nueva reglamentación de becas y el nuevo estatuto orgánico, hemos tenido un semestre complicado por la pandemia, pero el próximo año queremos seguir avanzando”.
Por su parte el licenciado Marco Antonio Aranda Martínez, afirmó que, con este nuevo Estatuto, la Universidad se pone al día con la realidad exterior, “se abrogó un Estatuto que entró en vigor en el mes de enero de 1984. Se logró reglamentar un régimen regulatorio universitario que permite y auspicia la vigencia del principio autonómico de la libertad absoluta para exponer las ideas; ya que eso es la esencia de la universidad pública, y que debe traducirse en los procesos plenos y abiertos a la integración y participación de los miembros en la elección de sus autoridades”.
“El nuevo instrumento orgánico busca la actualización en materia de derechos personales, libertades de ejercicio y apertura democrática en los procesos internos que tienen que ver con la elección de directores y rectores. Abriendo mesuradamente las formas de selección y el debate sano entre quienes aspiren a dirigir a la Universidad”.
Dijo también que se adecuaron las formas en torno a los derechos fundamentales de las personas, considerando a la paridad de género con una participación equilibrada entre hombres y mujeres y la integración de los órganos de gobierno de la Universidad.