Después de 36 días de estar hospitalizado, murió Lázaro, el bebé que fue declarado muerto al nacer en el Hospital General de Zona (HGZ) No. 20 “La Margarita” de Puebla y que pasó seis horas en uno de los refrigeradores de la morge del IMSS .
El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) detalló en un comunicado que el menor permaneció más de cuatro semanas con asistencia médica ventilatoria en la Unidad de Cuidados Intensivos Neonatales.
La causa del fallecimiento fue su condición de prematurez extrema y la falta de desarrollo en el vientre materno. Señalan que su estado de salud no evolucionó favorablemente, a pesar de todos los esfuerzos del equipo multidisciplinario para salvarle la vida.
Tras una investigación al interior de la clínica, se encontró que dos trabajadores incurrieron en irregularidades por falta de apego a la normativa institucional en la aplicación del protocolo correspondiente.
Ante lo cual el IMSS indicó que se realizarán las sanciones correspondientes, además de que las indagatorias siguen en curso.
El cuerpo del menor fue entregado a sus padres para que fuera trasladado al municipio de Tlatlauquitepec.
El bebé, bautizado como Lázaro, nació el pasado 21 de octubre con solo 23 semanas de gestación, horas después, fue declarado muerto.
El recién nacido fue enviado a la morgue del hospital, cinco horas después se ordenó al padre tramitar el acta de defunción momento en el cual se descubrió que estaba vivo envuelto en sábanas del IMSS.
Su padre, Albino Hernández, relató que fue el personal de la funeraria el que se percató que el bebé estaba vivo cuando verificaban la identidad del bebé para ser entregado. Albino a su vez confirmó que el menor estaba llorando.
Con información de El Informador.