A través de redes sociales se está alertando acerca de nuevas formas de extorsión por lo que se hacen llamados de alerta para evitar ser víctimas de la delincuencia.
Se explica que el modo de operar es mediante celulares de alta gama que dejan “tirados” en lugares públicos como centros comerciales o plazas que al ser recogidos se los llevan a sus domicilios y son ubicados con el geolocalizador.
Los dispositivos se utilizan como “gancho” para que la persona que los recoja se convierta en la víctima de extorsión. Una vez que se recoge el celular y se ubica su dirección, se presenta en la vivienda el “supuesto” dueño para reclamar el teléfono y se hace acompañar de la policía.
Una vez que se acusa a quien supuestamente encontró el celular se le lleva ante el ministerio público y ahí se apoyan en cómplices para acusar a las víctimas de robo y como prueba se ofrece el celular en cuestión.
La extorsión consiste en pedir entre 80 mil y hasta 160 mil pesos para retirar la demanda y no procesar a quien se “encontró” el celular.
Se hace un llamado a las personas para evitar caer en ese tipo de extorsiones y que no se recojan ningún dispositivo en la vía pública.