Todo comenzó cuando un hombre con un detector de metales en Ribe, Dinamarca, halló en una zona pantanosa unas 16 monedas vikingas.
Tras este primer descubrimiento se puso en contacto con expertos del Museo del Suroeste de Jutlandia y ellos llevaron a cabo una expedición arqueológica en la zona. Ya que, estas primeras monedas encontradas eran un verdadero tesoro vikingo.
“Al investigar esta región, resultó que no había solo una, sino que aparecieron muchas por el suelo”, cuenta el arqueólogo. Hasta el momento se han descubierto 252 monedas en el emplazamiento de un antiguo pantano.
Las monedas tienen unos 1,200 años de antigüedad. Además, son del reinado de Godofredo I de Dinamarca o de alguno de sus sucesores.
Este es un hallazgo espectacular porque las monedas de este periodo son extremadamente raras. La buena noticia es que las monedas están muy bien conservadas.
Las condiciones húmedas en las que se enterraron han ayudado a preservar el metal. Por lo que, los arqueólogos han podido estudiar las incisiones y los relieves. Esto ha revelado valiosa información sobre Dinamarca en el siglo IX.
“Podemos comprobar que todas las monedas están enteras, no están rotas ni perforadas. Fueron utilizadas en una economía monetaria real, tal y como gastamos el dinero hoy en día. Sabemos, además, que el mercado del rey en Ribe tenía una economía monetaria, por lo que todo encaja a la perfección”, aseguran los expertos.
Varias monedas en el anverso podrían representar al rey danés. Por otro lado, se desconoce el significado del ciervo y de la serpiente en el reverso de algunas.
“Este tesoro vikingo fue una ofrenda que realizron en un pantano. Es muy probable que haya sido un sacrificio a un dios pagano. Ya que, a comienzos del siglo IX, los daneses todavía eran paganos que adoraban a Odín, Thor y al resto de los dioses nórdicos” explicaron.
Se espera que este tesoro vikingo sea exhibido próximamente en algún museo de Dinamarca.
Con información de National Geographic.