Miles de manifestantes encapuchados salieron a las calles de Hong Kong ayer, desafiando a la jefa del Ejecutivo que recurrió a una ley de emergencia para prohibir el uso de máscaras en las protestas.
Los manifestantes levantaron barricadas en el centro del distrito comercial de Hong Kong y protestaron contra la legislación anunciada poco antes por la Jefa del Ejecutivo, Carrie Lam, coreando eslóganes como “Hong Kong resiste”.
Otra multitud con la cara cubierta también levantó barreras en el distrito de Kowloon Tong, mientras cientos más hacían una sentada en un centro comercial de Sha Tin, informó el canal televisivo RTHK.
Los manifestantes bloquearon el tránsito en una jornada que se tornó tensa cuando Lam advirtió que “si no cede la movilización endurecerá las medidas de contención”.
“El caos actual en Hong Kong no puede continuar indefinidamente”, declaró Yang Guang, portavoz de la oficina del gobierno chino para Hong Kong y Macao.
En varios puntos hubo enfrentamientos con policías que lanzaron gases lacrimógenos.
La prohibición rige para todas las concentraciones públicas, hayan sido autorizadas o no por la policía. Para quien viole la ley, consideran una condena de seis meses a un año en prisión.
Las manifestaciones iniciaron el 9 de junio pasado en rechazo a una iniciativa de ley de extradiciones a China, pero el movimiento se transformó en una denuncia por el recorte de libertades y la falta de reformas democráticas, en el mayor desafío de la excolonia británica desde la Revolución de los Paraguas en 2014.or.
Por Excélsior.