Afortunado sobreviviente del machetazo contra la burocracia dorada del viejo régimen, el director general del Instituto Nacional de Antropología e Historia, el antropólogo Diego Prieto Hernández, estuvo en el Congreso del Estado para recibir un reconocimiento por el 80 aniversario del organismo.
Después del evento habló con reporteros sobre los avances para que el gobierno federal decrete la cabecera municipal de Cerro de San Pedro como Zona de Monumentos Históricos.
Tal medida es innecesaria, tardía y resulta una burla porque el INAH –avaló, al igual que otras dependencias federales, estatales y municipales– en el sexenio foxista y en el gobierno priista de Fernando Silva Nieto que la empresa canadiense Minera San Xavier destruyera el histórico cerro que dio origen a la fundación de lo que ahora es la actual capital del estado potosino.
A los gobiernos panistas y priistas, con tal de beneficiar al capital extranjero, les valió que el Cerro de San Pedro y los municipios conurbados tuvieran la declaratoria como zona de protección de la vida silvestre (decreto del 24 de septiembre de 1993), que, en teoría, los ponía a salvo de los impactos ambientales.
La lucha del Frente Amplio Opositor a la Minera San Xavier no fue suficiente, recurrió a la defensa jurídica y la resistencia, pero en un parte de su núcleo campeó un ánimo excluyente y paranoico, nunca fue amplio sino minoritario, algunos de sus dirigentes terminaron en el gobierno o vinculados a la minera canadiense.
La destrucción del cerro con dinamita tuvo efectos en la cimentación de los dos templos y demás construcciones, por lo que el daño ya está hecho, sin dejar de mencionar el impacto negativo por la operación de la minera en la flora, fauna y acuífero, no se diga en la salud pública por el uso de cianuro.
En el 2014 la Secretaría de Salud estatal informó que a través de estudios se detectaron casos de niños con padecimientos por plomo y arsénico en la sangre; y la Coordinación Nacional de Protección Civil reportó la detección de cianuro en el acuífero y tierra del municipio.
Por esas y otras razones, semanas atrás el colectivo Artículo 27, que encabezan José Manuel Hermosillo y Carlos Lara González, y junto con el diputado Pedro Carrizales, mejor conocido como “El Mijis”, solicitaron al INAH que se desista de declarar al Cerro de San Pedro como Zona de Monumentos Históricos, exigen también una reparación del daño y borrar del escudo de armas de la capital y del estado de San Luis Potosí el cerro de San Pedro porque ya no existe y para que la modificación sirva como una “cicatriz”.
Durante la presencia de don Diego en el Congreso del Estado, no hubo un diputad@, ni siquiera los de Morena que se asumen como superiores moralmente a todas las demás fuerzas políticas por designio divino, para exponerle el caso de Cerro de San Pedro y el lamentable papel de comparsa que jugó el INAH para su destrucción y que la declaratoria en trámite es una mentada de madre.
El oro y la plata que extrajo la MSX no dejó ningún beneficio, solo daños y perjuicios, la remediación es una simulación; este caso quedará en la historia como una muestra de la indiferencia de la sociedad potosina por preservar uno de los símbolos que le daba sentido de pertenencia; hasta el finado historiador Montejano dio su aval para que lo hicieran polvo, al igual que un grupo de académicos de la UASLP. (Javier Padrón)