La banda de metal industrial Rammstein se encuentra de nuevo en medio de la polémica luego del concierto que ofrecieron en el Estadio Olímpico Luzhnikí de Moscú, Rusia.
En esta ocasión, los músicos alemanes decidieron protestar en contra de las leyes rusas que prohíben la difusión de orientaciones sexuales que no sean la heterosexual.
Con un polémico beso entre los guitarristas Paul Landers y Richard Kruzpe, los metaleros decidieron así expresar su rechazo a la homofobia en el país europeo, uno de los que tienen registro de múltiples agresiones en contra de la comunidad LGBT en los últimos años.
El propio grupo difundió la imagen del beso con el mensaje “Rusia, te amamos” en su cuenta de Instagram y la fotografía ya la dio la vuelta al mundo.
Los fans aplaudieron el gesto y agradecieron que Rammstein se sume a la lucha contra la discriminación por orientación sexual, a pesar de que podrían enfrentar problemas legales por hacerlo.
Esta no es la primera vez que Rammstein muestra apoyo a la Comunidad LGBT, pues el pasado 24 de julio, el vocalista de la banda, Till Lindemann subió a un bote de hule y navegó entre los asistentes a un concierto en Polonia ondeando la bandera arcoiris.
¿Por qué fue un acto subversivo?
Rammstein podría tener problemas con la justicia de Rusia al quebrantar la ley instaurada por Vladimir Putin en 2013, aunque parece no preocuparle mucho a los alemanes.
La Ley Federal contra la Propaganda Homosexual condena y castiga todos aquellos actos que difundan orientaciones sexuales “distintas a la tradicional” (heterosexual), sobre todo si son dirigidas a menores de edad.
Los castigos van desde multas económicas hasta la cárcel, dependiendo de la “gravedad” de la propaganda. De hecho, en Moscú las marchas del orgullo LGBT está prohibidas hasta el año 2114.
Por El Heraldo de México.