Javier Padrón
El próximo martes el exgobernador Fernando Silva Nieto impartirá una conferencia en la Sala Capitán Miguel Caldera del Colegio de San Luis.
El tema: “Seguridad política en SLP en la transición al siglo XXI”, fue invitado por la doctora Fuensanta Medina, investigadora del Programa de Estudios Políticos e Internacionales.
Será muy interesante lo que vaya a decir Silva Nieto a los estudiantes y público en general que asista, es un político del viejo régimen, vinculado al grupo político camachista que ahora lidera el canciller Marcelo Ebrard en la 4T.
La “seguridad política” es un concepto usual en los académicos de la materia y desconocido para los profanos, se refiere a grandes rasgos a la capacidad del Estado de garantizar el orden público, la justicia y derechos laborales, asignaturas pendientes desde hace décadas.
Su administración comenzó con los mejores augurios, se preparó desde muy joven para gobernar al estado bajo la advocación de su ancestro Rafael Nieto Compeán que fue gobernador de 1920 a 1923, político carrancista, un reformista visionario y de manos limpias.
Al final de su sexenio, a Silva Nieto se le vino el mundo encima con escándalos de corrupción y la derrota del PRI.
Le entregó el poder al panista Marcelo de los Santos a través de una alternancia negociada y fallida que no tuvo nada de democrática, honesta ni progresista.
Fue un priismo faraónico pintado de azul que solo se dedicó a favorecer a las élites y a sí mismo; fue transa, represor y autoritario, como salido de la misma escuela horacista de Silva Nieto.
La anfitriona, la doctora Medina, fue secretaria particular de Silva Nieto en un tramo de su gobierno, por lo que el ponente disertará en una zona de confort.
ESTACIONES EN VENTA
Varios grupos económicos se van a disputar tres estaciones de radio del Grupo ACIR que se pondrán en venta.
Las audiencias de la televisión como de la radio han caído de manera estrepitosa, su entreguismo al PRIAN fue su tumba con el surgimiento de las redes sociales, aunque en San Luis Potosí el cambio es lento, el gobierno estatal sigue siendo el principal anunciante y favorecedor con obra pública, cargos y contratación de servicios de la “minoría rapaz” que, por cierto, es malagradecida.