Al Zawahiri, considerado el cerebro de los atentados del 11 de septiembre de 2001 que dejaron casi 3.000 muertos en Nueva York, se convirtió en jefe de la organización terrorista tras la muerte de Osama Bin Laden en 2011 a manos de un comando estadounidense en Pakistán.
Al Zawahiri nació en Egipto en 1951 y creció en un barrio de clase alta en El Cairo, Egipto, hijo de un destacado médico y nieto de eruditos famosos. Fundamentalista islámico, se unió al grupo proscrito Jihad Islámica Egipcia cuando era adolescente, y fue detenido dos veces por ayudar a planear el asesinato de dos líderes egipcios.
Eventualmente se convirtió en el líder del grupo, que se dedicó a la creación de un estado islámico en Egipto, y en la década de 1980 se unió a los muyahidines que luchaban contra las fuerzas soviéticas en Afganistán. Allí se hizo amigo y unió fuerzas con Osama Bin Laden, convirtiéndose en su médico personal, y luego ambos fusionaron sus grupos.
Al Zawahiri y Bin Laden emitieron una fatua, o decreto, que decía: “El juicio de matar y combatir a los estadounidenses y sus aliados, ya sean civiles o militares, es una obligación para todos los musulmanes”.
Al-Zawahiri se hizo cargo de Al Qaeda en 2011, después de que Bin Laden murió en una redada de las fuerzas estadounidenses en Pakistán en 2011. En 1998, fue acusado por su presunto papel en los atentados con bomba del 7 de agosto de 1998 contra las embajadas de los Estados Unidos en Dar es Salaam, Tanzania, y Nairobi, Kenia, matando a 224 personas e hiriendo a más de 4.500.
El paradero de Zawahiri había sido durante mucho tiempo un misterio y desde finales de 2020 hubo rumores de que había muerto a causa por causas naturales.
Al Zawahiri apareció por última vez en un video el año pasado con motivo del vigésimo aniversario de los ataques del 11 de septiembre, meses después de que se extendieran los rumores de que estaba muerto.
En ese video, proclamó que “Jerusalén nunca será judaizada” y elogió los ataques de Al Qaeda, incluido uno que tuvo como objetivo a las tropas rusas en Siria en enero de 2021.
Con información de: Perfil