Marcela Loyola
La presidenta de la Comisión del Agua del Congreso del Estado, diputada Dolores Eliza García Román, condenó que las nuevas administraciones haya recibido a los organismos operadores del agua con carencias técnicas, administrativas, laborales, y financieras, las cuales deberán superar, pero siempre anteponiendo el bienestar de los usuarios.
Así lo dijo en la reunión que sostuvieron los legisladores con los titulares de organismos operadores del agua y presidentes municipales, donde el personal de la Comisión Estatal del Agua (CEA), les mostró como aplicar la fórmula del decreto 594, para el incremento de las tarifas del agua potable.
“Los organismos operadores en muchos de los casos fueron saqueados por malos funcionarios que su principal objetivo no era llevarle agua de calidad a sus usuarios sino saquear el organismo y satisfacer las necesidades de funcionarios corruptos. Y hoy aquí les quiero decir y compartir que estamos en una nueva administración, los tiempos ya no son los mismos que antes, los nuevos titulares deben de voltear a ver a nuestros usuarios, comprender sus necesidades y antes de aplicar está fórmula revisemos los altos salarios con los que se pagaban las anteriores administraciones, los altos costos de pago de servicios, de gasolina, hasta celulares o asesoría sin ningún fin personal, por no llamarles aviadores”, reprobó García Román.
La diputada reconoció que si se aplica la fórmula que viene en el decreto, se puede dar incrementos del ciento por ciento, por lo que pidió que se analice bien que la ciudadanía está saliendo de una crisis económica y de una pandemia, y que mucha gente tiene escasez de agua y pese a esto les llegan recibos muy altos.
Dolores Eliza García reiteró que los organismos públicos se encuentran en bancarrota y han sido a través de los años nidos de corrupción de funcionarios voraces, los cuales se tienen que rescatar pero sin afectar aún más a la ciudadanía.
Abundó que la entidad potosina tiene 206 millones de metros cúbicos de agua asignados para uso público urbano, de los cuales el 28 por ciento proviene de fuentes superficiales y el 62 por ciento de agua subterránea extraída de los mandos acuíferos, lo que los mantiene en extremo sobreexplotados, pues se saca más agua que la que de manera natural recarga, y se estima que hasta medio millón de potosinos no tienen acceso al agua.