¿Todos son los consentidos…?
“No hay consentidos en materia de desarrollo urbano” dijo el alcalde apenas la semana pasada, pero entonces, muchos podrían preguntarse si no hay unos cuantos consentidos, significaría que… ¿todos los desarrolladores son consentidos?
Y es que ya son varias las evidencias que ha dado el propio presidente municipal con el trato terso y delicado que ha tenido con la clase pudiente en varios ámbitos de los problemas públicos locales: agua, desarrollo urbano, servicios básicos, etc…
Les ha dedicado selectas y amplias sesiones sabatinas para escuchar sus “problemas” y ofrecer las “puertas abiertas” del Ayuntamiento capitalino.
Ante esto pueden prenderse varias alertas, pero por ahora valdría la pena señalar un rasgo que podría parecer intrascendente, pero en política dicen los clásicos, la forma es fondo.
La forma en la que el propio alcalde ha informado a los medios de comunicación sobre su trabajo y relación cercana con los empresarios y comerciantes, refleja el cuidado y delicadeza del trato que les concede, al menos en torno a temas como los cobros de agua y municipalización de los fraccionamientos de viviendas.
“Ni juicios ni tribunales”
Ya el pasado 12 de julio dijo que no quiere llegar “ni a juicios ni a tribunales” para cobrar lo que en derecho corresponde al gobierno de la capital ante los abusos que se supone habrían cometido varios empresarios inmobiliarios y desarrolladores en el pasado reciente.
Que no se sientan ni perseguidos ni presionados dijo también… total… varios de ellos llevan años sin atender las leyes para municipalizar sus fraccionamientos, no pagan agua, no pagan luz… pero en fin… la relación parece que seguirá tersa y delicada: en su reciente sesión de los sábados les autorizó 22 nuevos fraccionamientos, aunque habría que revisar a quienes se les dieron tales permisos para verificar si no están en esa misma lista negra de deudores…
Mientras que para el ciudadano común hay cero tolerancia, que pague a tiempo o le cobran multas, recargos, le llegan avisos, advertencias, ahí no hay trato terso, no hay “acercamientos” ni “invitaciones”.
Apenas esta misma semana, el propio alcalde dijo que de las “tres franjas” de deudores ante el Interapas los más importantes son la industria y el comercio, pero por lo visto, no les tocarían ni con el pétalo de una rosa, porque ahora sólo se les “invitará” a que paguen.
Ya quisieran miles de familias contar con esas deferencias y cortesías ante las múltiples urgencias domésticas para que el gasto alcance a pagar el kilo de huevo en lugar del recibo del agua.
El club de golf… en Monterrey
Quizá todavía se podría estar a tiempo de que se corrijan los graves e irreversibles errores que hoy tienen al Monterrey de la zona popular sin agua, con sus niños bañándose en las fuentes y parques públicos, porque los pozos se entregaron a los amigos pudientes de la clase empresarial quienes en sus fábricas, industrias, y campos de golf con zonas residenciales, no han conocido este verano, lo que es la escasez del vital líquido.
Acá no vaya a ser que se repita ese mismo patrón y que a los empresarios potosinos, se les sigan perdonando todos sus excesos a cambio solo de acudir a aplaudir en ciertos foros o financiar ciertas causas y con ello sigan gozando con los favores políticos como desde hace varias décadas.
Baste recordar que están por vencer algunas importantes y notorias concesiones de aguas en el poniente de la ciudad. Y del Realito y su enésima falla, ya hablaremos en una próxima entrega, porque esa parece la historia sin fin…
Por Lidia Juache