Arrecian las protestas por la ciclovía en Carranza. Propietarios de negocios advierten que se les cayó la clientela y están en riesgo de cerrar.
Además, desconocidos dañaron fachadas de negocios vinculados a la protesta. Así ocurrió en el local de Venustiano Carranza 1035, donde fue colocado un letrero en lona, que advierte que Carranza no es zona de ciclovía, porque esa medida la hace vialidad de desempleo e inseguridad.
Otra lona fue colocada en la ya muy destruida casa que alojó por años las instalaciones de la Secretaría de Ecología y Gestión Ambiental.
En ella, los barandales han desaparecido en forma impune y se resguardan drogadictos y ladrones.
Los comerciantes advierten que la ciclovía está subutilizada.
Con información de Pulso